ASERET: "No estamos solos"

9°Stella

Recordé mis momentos en Monville antes de irme a Nueva York; era increíble vivir en un pueblo pequeño donde la mayor parte del tiempo hay paz y tranquilidad, y ahora que volví siento maravilloso poder estar alejada un poco de la ciudad, tanto ruido y tanta contaminación me estaba volviendo loca; nada como el calor del hogar y el aroma del pueblo.
Eso mismo le dije a Kora después de la cena improvisada en mi casa hace unos días, me había sentido fatal por haberla presionado con el tema de su hermano Kol, así que trate de pasar la mayor parte de mi tiempo compensándoselo; Kora es una gran chica y de verdad le estoy tomando cariño, no quiero arruinar nuestra nueva y bonita amistad.

En dos ocasiones fui a su casa, y toda su familia es maravillosa a excepción de Kaiden, obvio; son personas increíbles y son fáciles de querer, Sun y yo hemos descubierto que tenemos muchas cosas en común, así que me fue muy fácil conversar y llevarme bien con el, fue divertido descubrir que a todos ellos les gusta molestar a Kaiden; quien obviamente no salió de su habitación en esas dos veces que estuve en su casa. Era de esperarse y se lo agradecí a dios, aunque debo admitir que en el fondo me sentí decepcionada; cosa que odiaba.

Después del estupido encuentro en la fiesta de Jason con Kaiden; las pocas ganas de querer hablar con el de casualidad, se esfumaron.
Se portó como todo un idiota y me maldije a mis adentros por haberme sentido sofocada y nerviosa al haberlo tenido tan cerca, aunque ese sentimiento desapareció en el momento en que Josh decidió pensar que yo era una damisela en peligro. ¿Quien se cree para atreverse a intervenir por mi? ¿Acaso soy una niña o de qué me perdí?. Por suerte para mi, les deje en claro a los dos que no voy a permitir que me pisoteen y tampoco que hablen por mi.

Aunque debo admitir que sentí una pizca de celos al ver a Kaiden entrar con Scarlett, mi casi enemigo con mi peor enemiga. ¿Y si se ponían de acuerdo para hacerme la vida imposible? Más de lo que ya la está haciendo Kaiden Castle. Solté un bufido de estrés mientras trataba de concentrar mi mente en las tareas pendientes de la universidad. ¿Porque no dejo de pensar en el estupido de mi vecino?
Le di otro mordisco a las galletas que Sun me había hecho, eran mis favoritas y nose como, pero por alguna razón él lo sabía; de hecho la primera vez que fui me di cuenta de que sabían más cosas sobre mí que yo misma.

<< flashback>>

- ¿estás segura de esto? - pregunté poco convencida a Kora quien literalmente jalaba de mi brazo para llegar a su casa.

- por supuesto que si! - dijo deteniéndose con brusquedad - kyle no deja de hablar de ti y de lo bien que le caíste, mis padres quieren conocerte; de hecho de ellos fue la idea de invitarte - volvió a jalar de mi.

- ¿y si no les agrado?

- eso no pasará - dijo entre risas - es imposible que alguien no piense que eres agradable.

- vale - asentí llenándome de autoestima.

En cuanto entramos a la casa noté que por dentro era exactamente como la recordaba de cuando los Gilbert vivían aquí; salvo por los nuevos muebles. Al entrar a la sala de estar nos recibieron kyle y otras tres personas, la mujer tenía un cabello oscuro muy parecido al de Kaiden, y sus ojos claros me hacía creer que se trataba de su madre; Kaiden tiene mucho de ella en el.

- ella es mi mamá- dijo Kora emocionada confirmando mi creencia de que se trataba de su madre - él es mi padre - dijo señalando al hombre de cabello castaño claro, supuse que de él vendría la herencia del cabello dorado y ojos azules de kyle y Kora. - y él es Sun. - dijo señalando a un hombre no muy alto de piel oscura y ojos café quien llevaba una extraña túnica con tonos metálicos de verde claro y dorado; extraño uniforme para un cocinero.

- es un placer conocerte al fin Stella - dijo la madre de Kora mientras me abrazaba; un gesto que no esperaba. - no nombre es Astra

Sonreí - es un nombre hermoso - y lo decía de verdad, es muy original - e igualmente es un placer