Capítulo 29

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Mis ojos se empañan de lágrimas al escuchar esa pregunta, los detalles que acabo de ver y la propuesta que que acabo de escuchar por parte de Liam, son demasiado para mi y me emociono.

Veo los ojos de Liam desesperados por una respuesta, pero también los veo llenos de sinceridad y calidez.

- ¡Siii! - grito feliz- claro que sí quiero ser tu enamorada- su rostro se dislumbra al escucharme y me da un beso.

Es el tercer beso que nos damos, pero para mí, sigue siendo como el primero, mil sensaciones agradables atraviesan mi cuerpo una vez más, pero hay una diferencia, este beso es tierno, es dulce, Liam toma mi rostro y junta su frente con la mía.

- Te quiero, oficialmente, "mi chinita"- dice tiernamente, haciendo énfasis en la última palabra.

- Te quiero más- le respondo con una sonrisa- mi chico de ojos azules.

Nos abrazamos de nuevo hasta que me veo en la necesidad de volver a hablar.

- Eso si, te advierto que nunca eh tenido enamorado, y que mis conocimientos sobre relaciones están en pañales- le informo

- Jajaja, no es que sea experto en el tema- dice haciéndose al inocente- pero caminaremos de la mano juntos, no pienso dejarte sola- su voz es decidida

Después de jugar un poco en la arena, Liam me convence de quitarnos las zapatillas y caminar a orillas de la playa, el me da la mano para no caerme y cuando menos me lo espero, me salpica agua y se ríe, mi lado de "si tú me das, yo te doy" sale a flote y lo empapo de agua, al final los dos terminamos mojados, sentados en la arena, mirando el hermoso atardecer.

- Es una vista muy bonita- susurro observando como el sol empieza a  ocultarse en el horizonte

- Creo que el lado positivo de que te hayas tardado dos horas, es que podemos tener esta maravillosa vista- dice con gracia a la vez que me río

Al igual que Liam, recuesto mi cabeza sobre su hombro, mientras el rodea mi cintura con sus brazos.

- Quiero preguntarte algo- dice lleno de curiosidad- ¿Por qué siempre que tienes que tomar una decisión me miras a los ojos?- hace una pausa- la vez pasada cuanto te pedí que dejaras que me quede a tu lado, te veía confundida, pero me miraste a los ojos y aceptaste rápidamente. Lo mismo pasó hoy.

- Talvez no me creas, pero me cuesta mucho confiar en las personas, tengo pocos seres queridos dentro de mí vida, y a los pocos que puedo llamar AMIGOS, son porque así los considero de verdad, sé que puedo contar con ellos, qué tengo su cariño y su respaldo. Los lazos que tengo con los demás son muy importantes para mi, me tomo muy enserio la amistad, al igual que el amor.

Liam me mira y sé que aún no me entiende.

- Siempre eh pensado que mientras más personas dejes que entren a tu vida, más personas pueden lástimarte. Y mientras más personas haya dentro de tu corazón,más personas pueden romperlo- suspiro - siempre dicen que los ojos son el reflejo del alma y es cierto, cuando te veo a los ojos, me doy cuenta que me transmites muchas cosas, talvez tu boca no me lo diga, pero tus ojos si. Cuando veo la sinceridad con la que me dices las cosas, derrivas todas las barreras de desconfianza que pueda tener, esa es la razón- termino de decir

Liam me brinda una sonrisa cálida y nos juntamos más el uno al otro

-Simplemente soy otra persona contigo, Liam- vuelvo a decir

- Lo mismo sucede conmigo,sacas lo mejor de mí- me responde

Estamos así por un tiempo, hasta que mi celular suena, veo la pantalla y se trata de mamá. Rápidamente me doy cuenta de las cosas, casi está anocheciendo.

- ¡ Dios mío! - me asusto y me reincorporo- es super tarde, mamá me debe estar esperando

- No te preocupes cariño, yo te llevo a casa- me responde ayudándome

- ¿Cariño?- repito impresionada por cómo me acaba de llamar

- Te recuerdo que hace exactamente una hora, treinta minutos y...- mira su reloj- ...cincuenta segundos que aceptaste ser mi señorita enamorada, y para mí eres mi cariño- dice con un gesto que me causa ternura

Me dispongo a buscar un taxi cuando mi enamorado me dice que trajo su coche. WOW dije mi enamorado... Se siente bien y un poco raro, pienso en mi interior.

Me pongo el cinturón de seguridad, mientras Liam se acomoda en el asiento del piloto.

- No sabía que tenías carro- le comento

- Es que no suelo usarlo

- ¿Por qué ? - le pregunto con curiosidad

- Porque no me gustan los carros y menos conducir- responde un poco tenso - solo lo hago cuando realmente necesito despejarme y estar solo. De hecho no tendría carro, ya que no lo uso frecuentemente, pero fue una de las condiciones de mis padres para que pueda estudiar acá. 

Lo escucho con atención intentando saber porque no le gustan los coches. Pensaría que es simplemente una cuestión de gustos, pero por la cara que pone supongo que es por algo más.

Después de unos minutos estamos en la esquina de mi casa.

- Déjame llevarte hasta la puerta- se ofrece Liam

- ¡Claro que no!- grito y trato de calmarme- digo que muchas gracias, pero aquí está bien

Liam insiste, pero solo quiero bajarme, no suelo mentirle a mamá y me pongo muy nerviosa ante la situación, si mamá me ve con Liam, tendré serios problemas.

Estoy a punto de despedirme de Liam cuando la puerta de mi casa se abre y sale mi madre.

- Ay no- digo con la voz ahogada

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¿La señora B , que digo la señora Bárbara, encontrará a Antonella con Liam?😂

FOREVERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora