#𝟹 ℰ𝓊𝑔𝑒𝓃𝓃𝒾𝑒 𝒻𝑜𝓇 𝓁𝑜𝓋𝑒 | @Princessarmy09

Capítulo 7 Dorothy

Volvíamos al palacio todos juntos. Fue un día hermoso.

—Iré a bañarla, ¿Me acompañas?

—Anne, tengo que hablar contigo.

—En un segundo te alcanzo. —guiñé el ojo y fui hacia donde estaba Roger.

—¿Qué pasa?

—Ven. —palmeó el sillón de la gran sala, me senté a su lado— Sabes que dentro de unos días es el cumpleaños de Dorothy...

—Lo sé.

—Planeo traer a toda su familia para hacer una pequeña fiesta.

Asentí con la cabeza.

—Será una sorpresa.

—Entiendo.

—Necesito que los vayas a recibir al aeropuerto, ¿Me harías ese favor?

—Por supuesto.

—Gracias... —pasó su brazo por mis hombros y me abrazó— ¿Cómo estás?

—Bien... ¿Sabes algo de él?

—Anne, ya sabes lo que nos dijo la psicóloga.

Roger y Dorothy habían asistido a una sesión con ella porque decía que era necesario, supongo que querría saber de mi vida contada desde otro punto de vista. Les dio a ambos una serie de recomendaciones las cuales no me dirían por nada del mundo. Aunque fuese mayor de edad, era muy importante saber a quiénes tenía a mi alrededor. Al principio ella dijo que era mejor que por ahora no supiese del príncipe ya que había sido una parte de mi estrés.

—¿Qué te parece si invitas a alguien a la fiesta?

—¿De verdad?

Mi hermano asintió con la cabeza.

—Invitaré a Azul. —sonreí.

Luego de toda la tragedia logré contactarme con ella y contarle la verdad. Se impresionó pero dijo que podía confiar en ella, desde ese momento no dejamos de hablar, era de gran ayuda para mí.

—Está bien.

—Iré con Dorothy. —me levanté del sillón.

—¿Quieres ir a la biblioteca mañana?

—Tengo que ir a la oficina y luego de compras con la reina, lo siento. —deposité un beso en su mejilla y me dirigí a la habitación de Dorothy.

Al entrar me encontré con ella desnudando a la bebé.

—Ven, vamos al baño.

La bañera estaba lista y con el agua tibia, sumergimos de a poco a Vida, primero comenzamos a enjabonarla, luego pusimos shampoo en su cabello.

—¿Puedo hacerte una pregunta, Anne?

—Claro.

—Roger... ¿Él no te dijo nada acerca de mi cumpleaños?

—N-No, ¿Por qué?

—Todos los años me prepara algo, pero creo que este no va a hacer nada.

—¿Qué te hace pensar eso?

—Bueno... él ya no tiene muchos detalles conmigo.

—Tranquila. Es época de renovar tratados, debe estar algo ocupado.

—Espero que sea eso.

A Vida le parecía gustar el agua pues disfrutaba de ella.

(...)

—Hola Owen. —sonreí, él se había mudado para poder trabajar perfectamente conmigo.

—Eugennie. —devolvió la sonrisa.

—¿Noticias de hoy?

Me senté en la silla frente al escritorio. Mi oficina (al igual que la interior) era bastante grande, por lo que decidí compartirla con él, cada uno había elegido su diseño.

—Finalizaron el interior del edificio. Ahora faltan más ordenes para que esté disponible.

—¿Ordenes?

—Preguntaron si se le ocurre otra cosa para hacer. La atención psicológica y la estadía no funcionan, al final del tratamiento ellas vuelven con sus agresores.

Me encargaba de la fundación de Charity, parecía no tener éxito en ningún país. La había instalado en España, Arabia Saudita, Nigeria, Siria y ahora habilitaría una en Escocia.

—¿Y las denuncias?

—Las retiran. La psicóloga tiene estándares y dice que no saben cómo mantenerse, por eso regresan.

—¿Qué sugieres?

—Mi cerebro se encuentra seco.

Tomé mi agenda en donde solía anotar ideas. Al abrirla me encontré con las ideas tachadas, es decir, que ya las había cumplido.

Me senté cruzada de piernas, extrañamente era mi posición para pensar.

—¿Cursos?

—¡Eso! ¡Cursos con salida laboral!

Owen sonrió.

—Y los mejores abogados para llevar a cabo las denuncias con éxito.

—Las mujeres normalmente son de clase baja, no podrán pagarlos.

—Serán gratis para ellas. Pagaremos su sueldo con parte de la herencia que me dejó Adán.