Capítulo 10

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POV:  Adara

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POV:  Adara

———


No puede haber dicho eso. He tenido que oírlo mal. Sí, eso es. Lo he oído mal. Pensé con la mente embotada.

Los ojos grises de Enzo se concentraron en mi rostro pasando una emoción tras otra.

Quería volatilizarme. Desaparecer.

¡No puedo que creer que haya dicho eso!

Su... prometida. Su... futura esposa. Mi Dios.

Incluso Eve y Dan estaban estupefactos.

La muchedumbre comencé a murmurar entre ellos sin salir de su asombro.

—No puedes estar hablando en serio, Enzo —le habló el barbudo del bar.

—¡Estás condenado de ser así!

Tenía ganas de vomitar.

Sentía una fuerte presión en el pecho.

El rostro de Enzo era inflexible.

—Si os metéis con mi futura esposa, os estaréis metiendo conmigo —alzó la voz con irritación—. Si tocan lo que me pertenece, si hieren de cualquier forma a mi mujer soy peor que un lobo enjaulado.

¿Su mujer?

—¿Y por qué no nos dijiste nada? —saltó ese tal Jake que parecía de la misma edad que Enzo, pero era totalmente opuesto a él. Más delgado. Rubio. Y de ojos caramelo.

—Quería saber cómo la trataríais —añadió con más seriedad—, pero ya veo que me he equivocado.

No sé por qué seguía callada. No sé por qué no me movía hacia Enzo y con un «par» les demostraba a todos lo equivocados que estaban respecto a mí.

Noté como Eve se acercaba a mi oído.

—Tú no querías atarte a ningún hombre, Mayi, pero el destino ha hecho todo lo contrario —me susurró ante este absurdo, tenso y lioso malentendido—. Así que...

Me apretó con suavidad el hombro.

Sé que usaba mi segundo nombre cuando quería que entrara en razón o viera lo equivocada que estaba. Y aargh... como odiaba sus «así que», porque dejaban en el aire el resto de lo que quería expresar para que yo lo adivinara. Como si fuera una especie de enigma para que lo resolviera.

—Ha vuelto Mac tíre. No puedo creerlo. Nunca pensé que volvería a verlo —expresó alucinado Dan.

Lo contemplé desconcertada tras oír ese nombre.

—¿Quién? —le preguntó Eve.

—Alguien muy querido para Enzo siempre lo llamaba «lobo» en irlandés. Y a veces para irritarle también lo llamaba Beag Jamie, «Pequeño Jamie» en irlandés. Jamie es su segundo nombre —nos comentó ante nuestra confusión—. Él nunca lo llamaba Enzo. Poco puedo contaros, pero hace mucho tiempo que Enzo prohibió a todo el mundo que lo llamáramos por esos dos nombres —añadió con una mueca de tristeza.

El deseo de Enzo [Deseo Éire #1] © (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora