Descontrol ^ Kakayama

Capullo de cambio

Los meses habían pasado y la rutina se hizo constante.

Tenzou trabajó como bestia, tanto como Tsunade se lo permitió, se iba a las 5 de la mañana y llegaba a las 8:30 junto con la rubia. Kakashi se esmeraba tomando terapia individual, se acostumbró a los medicamentos y los ejercicios de aprendizaje y practica para la universidad lo relajaban.

A veces estaba estresado y ansioso, a veces se sentía abrumado y cansado, pero siempre estaba Tenzou a su lado, había descubierto una paz en él, sin embargo había algo que le incomodaba, a veces se veía.. muy distante, como si algo no encajara. Kakashi decidía ignorarlo e intentaba continuar con su día a día tanto como podía, tanto como su mente se lo permitía.  Ahora, Kakashi se recuperó físicamente, comió lo apropiado,se ejercito lo necesario y regresó el hermoso Kakashi que Tenzou disfrutaba admirar.

Ni Kakashi ni Tenzou estaban perfectos, Tsunade lo sabía, aun morían de angustia y dolor día a día, pero aunque Kakashi fuera llenado de voces por la noche o Tenzou de temor al hablar, se veían mejor que nunca.

En estos momentos, Tenzou trabajaba en la florería, se había encariñado mucho con las flores, era tierno y gracioso al mismo tiempo, Tsunade seguía en la farmacia y solo quedaba Kakashi en la casa.

Jiraiya venia de vez en cuando a visitarlos, pero había algo que a Kakashi le incomodaba, el otro día escucho a los adultos hablar sobre algo, no habían visto a Orochimaru desde hace meses, sabían que estaba bien, pero se negó a hablar con cualquiera de los dos, todo fue por Tenzou, creyeron que fue lo mejor, pero... todo fue muy revoltoso de escuchar.

Mientras seguía pensando boberías en el sillón de la mansión, el sonido de la rejilla de correo que se encontraba en lacas ambigua sonó, Kakashi tomo una respiración nerviosa y se aproximó a la puerta, bajo al sobre en el suelo y quedó en shock, tendría que esperar a Tsuande y Tenzou.

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-¡Llegamos Kakashi!.- Grito la rubia entrando a la casa.- Carajo, huele excito ¿Dónde te metiste niño?.- Pregunto Tsunade caminando a la mesa bien servida.

Tenzou se sorprendió de igual manera.

-Tardaron más de lo usual para llegar.- Dijo saliendo de la cocina quitándose el mandil.

-Es culpa de Tenzou.- Señalo al castaño que tomaba rápido lugar en la mesa.

-Si, hub-bo un problema en la flo-florería, mis disculpas.- Rasco su nuca apenado mientras veía como los demás se acomodaban en los respectivos asientos.

-Ya veo.- Hablo Kakashi serio mientras se sentaba junto a los otros.

-Pareces distraído, pero hiciste buena comida.- Comento la rubia.

-Si.. paso algo hoy.-

-¿Tu-tuviste algun episodio?.- Pregunto Tenzou un poco asustado inclinándose en la mesa.

-No, no es nada malo.- Sacudió sus manos en negación.

-¿Entonces?.- Pregunto Tsunade.

-Es algo muy importante.- Se acomodo en su silla y tomo la carta que había puesto en esta.- Yo...- Trago saliva y sintió un escalofrío nervioso.- Fui aceptado en la universidad.- Les dio una mirada esperanzada.

Tsunade sonrió grande y Tenzou abrió los ojos.

-¡Ja! No me sorprende, ¡Estoy orgullosa de tu muchacho!.- Se acercó para dar un ligero golpe en su costado.

Cuando termino de sobarse miro al castaño el cual se veía muy contento.

-Es.. es genial Kakashi.- Sonrio con optimismo, esto era.. era maravilloso.- Era obvio, tu eres así

-Gracias.- Se mordió su labio inferior.- Comenzará el ciclo en agosto, casi cuando llegamos aquí.- No pudo evitar decir.

Al mismo momento, Tsunade y Tenzou compartieron una extraña mirada.

-Se tiene que celebrar Kakashi, esto es legendario.- Dijo Tsunade.- Pero ahora, a comer.- Tomo un trozo del pollo que Kakashi preparo, probablemente por la emoción del resultado.

Y las cosas volverían a ponerse mucho mejor.

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Chao.- Sakka-chan.