_/\One Shots_ Inazuma eleven/\_

Hikaru Ichihoshi (Orion)

Narrador Omnipresente:

Y ya había pasado una semana desde que Hikaru se enteró de la verdad y era el mismo, había que decir que era demasiado servicial e intentaba arremediar todo lo que hizo.

Pero aún quedaba alguien a la que no se atrevía nía a mirar, pero ya era hora...

Se miró en el espejo y tomó aire, era hora de ir al hospital y contarle lo que sucedió a Wendy, una chica del hospital con la que pasaba tiempo siendo "Hikaru"

Muy confuso de explicar la verdad.

—Vengo a ver a Wendy Mackarfer —dijo este a la mujer de la recepción—

—Claro, pasa Hikaru, por cierto, vi en la tele que al fin solucionaste tu problema, felicidades

—Gracias Doris

Hikaru fue hacia el ascensor, no sabía porque, pero sentía que debía avisar a aquella mujer de que había venido de visitas, el ascensor paró en la segunda planta, y este empezó a buscar la puerta que tuviera el número 14.

Tomó aire y tocó la puerta, esperó... Esperó y cuando ya pasaron minutos en donde cada 30 segundos tocaba la puerta finalmente decidió abrir.

Ahí estaba ella mirando a la ventana absorta del mundo con sus cascos puestos.

—Wendy —llamó, pero esta no se movió— Wendy —volvió a llamar sin mucho éxito, y al final se acercó a ella y le tocó el hombro—

—¡Hikaru! —sonrió para quitarse los cascos y tirarse encima del chico— Creí  que te habías enfadado y olvidado de mi —dijo con un puchero—

—Lo siento, es que la verdad no me atrevía a venir después de lo sucedido con mi personalidad... Ya sabes

—No te preocupes, desde un principio supe de tu problema, era raro verte llegar con una cara decidida para que de la nada te cambies a la ropa de un ingresado —rio mientras se separaba—

—De todas formas tengo que agradecerte que cada vez que estaba en el hospital me acompañaras, fuiste una gran compañía

—¿F-fuiste? ¿M-me vas a abandonar? —preguntó con los ojos llorosos—

—¡N-no lo decía de ese modo! Bueno, como ya el problema de mi personalidad se solucionó no hace falta que venga más al hospital, pero vendré a visitarte —le sonrió—

—¡Eso es fantástico! —sonrió mientras se quitaba las lágrimas—

—¿Paciente Wendy Mackarfer? —preguntó un médico entrando en la habitación—

—Si, esa soy yo, ¿ocurre algo? —dijo algo extrañada— por cierto, usted es nuevo a qué si —dijo en un tono infantil—

—Si, al parecer el médico que la tenían asignado obtuvo un mejor puesto en otra ciudad —entró más en la habitación— Soy recién llegado a este hospital pero tengo la suficiente experiencia, me llamo Yukichi Hako

—Mucho gusto Yukichi-san —sonrió con alegría—

—Necesito confirmar la información que me dieron, así que si no es mucha molestia joven —dijo mirando a Hikaru—

—¡Ño! No se puede ir —se queja la chica de baja estatura abrazando el brazo del peli azul—

—Bueno, supongo que no pasará nada si se queda —dijo sin más para ver como los dos jóvenes se sentaban en la cama— Según esto llevas 12 años aquí

—¿Eh? ¿12? —preguntó extrañada para después ponerse a pensar—En realidad llevo aquí desde que nací, pero... ¿12 años? —dijo mientras pensaba en que se podrían haber equivocado— ¡Ah! Ya lo recuerdo, al principio mis padres insistían mucho en que debían cuidar de mi y que me quedase en casa, pero bajo la condición de que tenga revisiones diarios, eso hacían hasta que llegué a los 3 años, en donde se cansaron de tanto ir al médico y al final me ingresaron directamente, según mis padres eso sucedió, así que las enfermeras no debieron contar esos 3 años