Alaric's Daugther |Elijah Mikaelson|

Capítulo 30: directo a la trampa...

Aun no sé porque rayos le hice caso y dejé que Reebekah me llevara a la vieja plantación, la primera mansión en la que habité, junto con predeciblemente Hayley y Chloe, parece que iban a sacar a cualquiera que podría usar en su contra fuera de la vista de todo New Orleans.

—Gracias por el aventón— soltó Chloe saliendo del auto—. Por cierto, ¿no te quieres quedar? —le preguntó a Reebekah extrañamente.

—Paso— dijo sonriéndole, por alguna razón estás dos se llevaban demasiado bien, tal vez porque eran igualitas, y a ninguna la soportaba mucho…

—oh vamos, es luna llena, mi manada se vuelve humano solo este día, y he pensado hacerles una pequeña bienvenida aquí— le dijo lo mismo que me dijo a mí, aunque no tenía ni idea de que era aquí. Pero igualmente la rubia me miró acusatoriamente…

—a mi ni me mires, no tenía ni idea— solté encogiéndome de hombros.

—Los barriles de cerveza detrás, ¿verdad? —soltó alguien de repente con unos barriles, por lo que la original y yo lo miramos extrañadas.

—Claro—le dijo Hayley quien por supuesto sabia del plan de mi hermana.

— ¿Qué dices entonces?, ¿nos ayudas con la fiesta? —le volvió a preguntar y esta vez asintió sonriéndole…

El resto de la tarde, las tres se la pasaron arreglando todo para la bienvenida, incluso bebidas, comida, y por supuesto ropa colgada afuera para todos los lobitos, mientras yo por mi parte me quedé al margen de todo, no me apetecía mucho compartir con una manada de lobos…. Apenas salió la luna y la casa se fue llenando poco a poco de personas, por lo que me aparté más de los lugares concurridos…

—Deberías unirte a la fiesta…—soltó Chloe al encontrarme en el estudio buscando algo que leer.

—La verdad prefiero quedarme aquí…—le dije cortantemente para luego sonreír—. Aunque si pillo una que otra cerveza tal vez pueda pensármelo—solté sonriendo por lo que ella rió.

—Con que aquí estabas…—soltó un hombre bastante apuesto entrando al estudio, lo cual inexplicablemente puso a Chloe nerviosa—. ¿Dónde te has metido todo este tiempo?, me tenias preocupado— le dijo a mi hermana por lo que le vi extrañada y confundida.

—Estaba con mi hermana, ella es Eider— le respondió Chloe algo nerviosa, antes de que el hombre extraño me miraba con desprecio.

— ¿Tu hermana?, dudo que le puedas llamar así, cuando fue su padre quien te abandonó a tu suerte…—soltó él con desprecio, parece que alguien conoce la historia.

—No la abandonó a su suerte, he venido siempre que he podido, y por eso he estado cuidándolo estos últimos días…—le dije cruzada de brazos sin inmutarme.

— ¿y dónde está tu padre ahora? —preguntó molesto.

—Muerto— le contesté cortantemente por lo que aligeró un poco su expresión—. Además, ¿Quién rayos eres tú para juzgarme o juzgar a mi padre?

—Jackson, el hermano de la mujer a quien abandonó tu padre— soltó él sorprendiéndome totalmente…

—no tenía ni idea de que tuvieras un tío—le dije a mi hermana algo sorprendida—. De hecho, según tus palabras no tenía a nadie más…

—Solo son humanos una vez al mes, así que solo tengo a alguien un día al mes por algunas horas…—soltó ella en su defensa.

—Te he estado cuidando aun así, no deberías haberla buscado, mira a donde te ha llevado, eres parte importante de la manada, no deberías ponerte a ti misma en peligro…—le regañó fuertemente por lo que Chloe apenas asintió.