Alaric's Daugther |Elijah Mikaelson|

Capitulo 6: no todo es lo que parece.

— ¿eres hermano de Klaus? —pregunté al reconocer donde lo había oído, pero luego recordé lo que me había dicho el hibrido sobre un hermano que quería matarme.

— sí, ¿Cómo…? —me miró extrañado.

—tu apellido no es común, ¿por cierto eres el hermano que me quiere muerta? —pregunté sin rodeos cruzada de brazos.

—No, solo quiero que desistan de buscar la tediosa cura— dijo él respondiendo mi duda un poco molesto y asustado.

— ¿a qué temes?, ¿a Silas?, porque en ninguno de mis planes está despertarlo, así que despreocúpate— dije tranquilamente.

— ¿Qué garantía tengo de eso? —preguntó seriamente.

—ninguna, tendrías que confórmate con mi palabras—me miró sin mucha confianza—. Mira si quieres puede creerme, sino me no importa realmente— dije sosteniendo la puerta para cerrarla.

—digamos que te creo, ¿puedo confiar en ti? —asentí sin dudarlo—. Está bien, no te matare por ahora— dijo como si me hiciera un favor, pero igual asentí—. Además me caes bien— me sonrió y si no fuera porque pensaba matarme creería que estaba coqueteando conmigo.

—El sentimiento no es mutuo— solo dije antes de cerrar la puerta y subir corriendo a mi habitación.

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Había conciliado de nuevo el sueño, cuando escuché alguien tocando la puerta, comienzo a pensar que el universo esta confabulado contra mi sueño. Volví a salir de mi habitación para ver quién era ahora, y mi sorpresa fue más grande que la anterior.

— ¿hoy es el día de visitar a Eider? —pregunté un poco molesta al abrir la puerta y encontrarme con Klaus, por lo que él me vio extrañado—. Tu hermano Kol estuvo hace unos minutos aquí…—expliqué.

— ¿te hizo algo? —Negué rápidamente— ¿sabes que te quiere muerta? —preguntó esta vez y asentí sin inmutarme.

—Sí, él me lo dijo, aunque ya tuvimos una charla que incluía no matarme— dije burlonamente—. ¿A qué vienes?, porque estoy segura que no vienes de visita social—le cambié el tema rápidamente a uno más importante—. ¿Es sobre la cura?, porque mientras más rápido la encuentres más rápido podre seguir a lo que vine a este pueblucho.

— ¿y eso es…? —Preguntó con curiosidad pero me quede en silencio—. Sabía que no me lo dirías. Pero tienes razón, vine a decirte que ya encontramos lo que nos faltaba para encontrar la cura, así que ve enlistándote para ir a acampar mañana temprano amor— dijo dulcemente, espera ¿dijo temprano?

— ¿a qué hora?, y ¿A dónde me llevaras? —pregunté sin inmutarme.

—la ubicación lo sabrás a su debido tiempo, y lo de la hora tres de la mañana— dijo como si nada, a madrugar otro día mas.

— ¿ustedes los vampiros no duermen? —pregunté retóricamente—. De acuerdo hasta entonces— me despedí antes de cerrar la puerta.

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¿Saben que es más tedioso que despertarse en la mañana?, despertarse en plena madrugada, como si aquel lugar desconocido al que iré desaparecerá si vamos más tarde. Con muchísima pereza me levanté de mi cama, 2:30am, marcaba mi celular, tenía menos de veinte minutos para arreglarme antes de que vinieran por mí.

Por lo menos tuve la genial idea de arreglar mi equipaje ayer en la tarde, sino creo que faltaría a esa cita. Fui rápidamente a tomar una ducha, para luego ponerme algo abrigado, pues el clima a esta hora no era muy cálido que digamos. Un blusa manga larga blanca, unos jeans, mis botas negra, un abrigo y mi chaqueta de cuero era lo que había arreglado para hoy. Dejé mi pelo suelto, tomé mi equipaje, y antes de que diera un paso a fuera de mi habitación, sonó el timbre.