—Lo tengo todo bajo control…—solté cruzada de brazos—. Si quieres puedes ir con ella, y confirmarlo tú mismo…
—Eso haré no confío en ella, hará cualquier cosa para vengarse de mi familia—dijo desconfiadamente por lo que rodé los ojos.
—si me hubiera querido hacer algo lo hubiera hecho ya, ¿no crees? —pregunté burlonamente.
—A veces no ataca a los demás, le basta con hablarle…—respondió haciéndome pensar en mi conversación con ella—. ¿Te dijo algo cierto? —negué rápidamente—. ¿Qué te dijo? —suspiré antes de responder.
—Que era diferente a las demás mujeres en tu vida…—respondí sin darle mucha importancia, pero parece que si la tenia, pues su rostro se volvió serio y molesto—. ¿Ocurre algo?
—Necesito saber que sabe, si sabe algo de tu sangre y de lo que mi hermano puede hacer en el futuro con tu descendencia, estoy seguro que las brujas irán por ti— soltó sumamente preocupado por lo que asentí—. Vuelve a casa…—volví a asentir sin protestar.
—Lo sé, voy a volver— solté sonriendo.
—Por cierto— soltó antes de dar un paso para irme—. Mi hermano está en medio de un trance por el cuchillo de papá tunde que tiene clavado en el pecho, necesito que se lo saques…—cambió extrañamente de tema.
— ¿Quién se lo clavó? —pregunté curiosamente.
—yo…—le miré algo sorprendida—. Iba a clavárselo a Reebekah, así que le di tiempo para que escapara— asentí al ver que tenía razón.
—eso es compresible, pero aun no entiendo, ¿Por qué tengo que hacerlo yo? —pregunté seriamente.
—Te tiene algo de cariño, le has puesto en su puesto un par de veces…—comenzó diciendo antes de que le interrumpiera.
— ¿Cómo sabes eso? —le pregunté incrédulamente pero él solo sonrió.
—El mismo me lo dijo, por lo que estoy más que seguro que eres la persona a la que menos le haría daño, además si intenta algo saber defenderte bien…—soltó alagándome solo para que aceptará porque rodé los ojos antes de asentir.
— ¿Qué quieres que haga exactamente con él? —pregunté sin rodeos, pues si solo necesitaba que le liberara del cuchillo lo hubiera hecho el mismo.
—sabia que eras lista…. Necesito que intentes disuadirlo de matar a Reebekah…—respondió como si nada.
— ¿solo eso?, no veo tan malo que mate a la rubia, no me cayó mal— bromeé pero parece que no era momento de bromas, su rostro estaba tan serio como antes—. Bien, intentaré mantener a tu hermanito bajo control, aunque no prometo nada, no veo porque rayos me haría caso…—solté como si nada y para mi sorpresa sonrió.
—Te sorprenderías de lo que pudiera ser por ti…—soltó él pensativamente—. Ve con cuidado— dijo como si no hubiera dicho nada antes por lo que hice lo mismo y asentí antes de él darme un corto beso en los labios y desaparecer.
************
La falta de sueño, mas el largo recorrido de regreso a casa, me agotó completamente, la próxima vez que salga de repente procuraré llevarme un auto…. Luego de un par de horas llegué a la mansión totalmente agotada, por lo que busqué algo de agua antes de subir a mi habitación, para equiparme con lo necesario para tratar con Klaus.
Un par de estacas, una navaja, un poco de verbena, y mi brújula para saber en qué parte de su pecho estaba el cuchillo, fue lo que tomé antes de ir a la habitación de Klaus…. Al entrar lo encontré inconsciente agonizando en su cama, con el dorso descubierto, lo cual por alguna razón me puso algo nerviosa.
Sin dudar más, tomé la brújula y dejé que me guiara hasta en donde estaba el cuchillo. Al detenerse la aguja marcando el lugar, tomé mi navaja, y sin titubear le abrí el pecho, para luego entrar mi mano, y sacar el cuchillo, algo que realmente se sintió peor de lo que pensaba.
Solo pasaron segundos antes de que Klaus despertara y me viera algo extrañado y débil…
—Sabia que un cuchillo embrujado no era suficiente para noquearte por completo— bromeé para aligerar el ambiente y él me sonrió.
— ¿Qué haces aquí? — preguntó con voz débil.
—Si no estás poniendo atención, a sacarte el cuchillo y terminar con tu agonía— solté sarcásticamente y volvió a sonreír.
— ¿Elijah te envió?, ¿cierto? —preguntó como si nada, al parecer no era tan tonto como creíamos, por lo que asentí.
—cree que me harás caso si te pido que no mates a Reebekah…. Aunque si te soy sincera no me importaría que lo hicieras…—solté algo pensativo mientras él se sentaba en la cama, viéndome curiosamente—. Pero aunque no la soporte, sigue siendo tu hermana, no puedes matar a tu hermana por más mal que te haya hecho…
—amor, hizo lo que nadie había hecho en mil años.... Destrozarme el corazón— soltó notablemente dolido…
—Lo sé, ya sé lo de ella mandando a tu padre aquí, aun sabiendo que te quería muerto…—dije como si nada para luego suspirar—. Entiendo que te haya traicionado en el pasado, pero…
—pero nada, justo cuando baje la guardia, y le dejé vivir con Marcel, me traicionó— soltó con odio pero aun muy débil—. No le perdonaré la vida, aunque seas tú quien me lo pidas…
—Niklaus— le llamé por su nombre completo como pocas veces hacia, por lo que me miró inmediatamente—. Me pediste que te perdonara hace unos días…— solté sacando mi última carta y para mi grata sorpresa me miró escuchando atentamente—…si le perdonas la vida a tu hermana, lo haré…
— ¿Quieres decir que si dejo a la traidora de mi hermana viva dejaras de verme con odio? —preguntó seriamente por lo que asentí.
—Perdonar a tu hermana, sería la mejor prueba de que no eres tan malo como todo el mundo cree…— respondí algo nerviosa por alguna razón.
—Tanto tiempo que has pasado con Elijah, y ya te ha contagiado sus estúpidos discursos para tratar de disuadirme— soltó de la nada justo cuando creí que lo había convencido—. No sabes lo que fue huir el 1919 de mi padre, como destruyó cada cosa que construí aquí, como tuve huir como un perro de él, con miedo, y todo por culpa de mi egoísta hermana…
—Niklaus…—le intenté interrumpir pero no me dejó.
—No me vuelvas a llamar así…—dijo con rabia pero aun débil—. Sé lo que intentas…
—No estoy intentando nada…—me intenté defender pero de nuevo no me dejó.
—Sabes que tienes el poder de disuadirme, y te aprovechas de ello…—dijo sin entender a que se refería, por lo que le miré sumamente confundida—. Espera…—soltó sonriendo burlonamente—… ¿no lo sabes cierto?, mi hermano te manda aquí, y ni siquiera te dice la razón…
— ¿De qué estás hablando? —pregunté sumamente confundida, y sin saber en qué momento se recuperó un poco, se acercó a mi acariciando mi rostro con mano.
—Mi hermano no es el único que siente algo por ti…— respondió de golpe, haciéndome entrar al fin en razón, ahora muchas cosas tenían sentido, incluso lo que había dicho Celeste…
— ¿Sientes algo por mi? —pregunté sumamente nerviosa, esto no me lo esperaba…
***********************************
Hola de nuevo, hasta aquí llega el maraton, espero les haya gustado, siento dejarlas con la intriga es parte del encanto okno XD, intentaré subir el proximo cap, que por cierto ni he comenzado a escribir, entre mañana y el sabado :3
ESTÁS LEYENDO
Alaric's Daugther |Elijah Mikaelson|
FanfictionLa primera cazadora... La última Petrova humana... Una mala combinación si se le agrega dos vampiros originales...