Capítulo 25: Decisión Apresurada

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Agosto de 1941











Una hora antes.

Siempre suelo pensar porque la sociedad hace que nosotros mismos nos limitemos argumentos, pensamientos y acciones.

¿Solo por nacer de color? ¿Solo por tener mejor economía que otro? O ¿simplemente por permanecer en una religión que el mundo no aprueba? Creo que somos prejuiciosos que nos encanta ver lo que hacen mal los demás para olvidar que el mal que nosotros hacemos.

Es decir por nacer en un círculo que yo no elegí pero que amo me sentenciaran a muerte, por no querer o hacer lo que los otros quieren. ¿Solo por eso?

Adoro mi religión, pero en estos momentos ¿Dónde está Dios? Que ve como su pueblo es masacrado sin piedad, la gente escondida ¿solo hay que esperar estar muerto para una salvación eterna? Lo que Dios quiera ¿Dios quiere esto? ¿Dios hizo un ser tan despiadado como el causante de todo esto? Dios sabe lo que hace, ¿entonces quiere que suceda este acto sin humanidad?

Si es un castigo ¿por qué a ellos?¿por qué a nosotros? Pero la respuesta es simple: no hay culpables nunca lo hay, así que la pagan todos.

Dios sabe porque suceden las cosas, entonces él muy bien sabía que Caín mató Abel mucho antes que el hecho sucediera, entonces porque hizo ese destino para Abel, si era bueno. Exacto. ¿Por qué permitió ese hecho tan inmoral? ¿Por qué no lo detuvo y dejó que lo matara? ¿Por qué Abel que era bueno y no Caín que era el malo?

Aunque duela los buenos la apagan.

De paso somos hipócritas hasta con nuestro Dios e interesados, decimos que hay que ayudar y somos los mismos que no dan la mano al más necesitado. Valen más manos que ayudan que labios que rezan. Siempre trata de hacer el bien aunque los demás lo impidan.

Dios dio todo por nuestro pueblo para que no sufriéramos ahora somos nosotros que nos causamos mutuamente el daño. El prefirió sacrificarse para que nosotros no pagáramos.

Entonces eso trata la vida ¿dar la nuestra para el prójimo? No literal, sino figurativamente, no hacer que los demás lo hagan, de eso no se trata, sin embargo, hacemos todo lo contrario.

Aun así existe el bien y el mal, dos caminos y saben que es lo más simple de todo esto, es que nadie nos obliga a elegir y por ende una pequeña parte de nosotros sabemos a lo que nos enfrentarnos así que no nos victimicemos porque eso más culpables nos hace ver, solo aceptar que hemos hecho las cosas mal.

Siempre suelo ver el lado positivos de las cosas, al menos que no se trate de Edward Jefferson porque ahí todo es malo. Pero entre tanta desgracia la esperanza de ver un rayo de sol está sepultada en los escombros de miles de sueños de personas que no se merecían nada belicoso.

Los sueños son lo que el subconsciente quiere, eso dicen y las pesadillas son lo que odiamos a muerte.

A mí no me gusta odiar, detestar pasable, pero la vida es muy corta para tenerla infectada con la amargura del odio.

Por ejemplo detesto la mentalidad cerrada, la mujer puede hacer exactamente lo que hace un hombre de igual manera, podemos votar, trabajar usar pantalón. Cosas que a largo de estas años recién se está tomando en cuenta.

Siento impotencias que algunos hombres aún tengan una mentalidad mediocre e insulsa. Sé que va a tardar para que esa mentalidad sea erradica al cien por ciento y ni en cien años dejara de existir alguien.

Todo lo que he dicho va de la mano. Prejuicios.

Estamos en el cine, llevo mis rizos sueltos con un pequeño adornos en la cabeza, un vestido color crema con unos guantes del mismo color. Juego con la tela de mis guantes en espera de Eric que está en la boletería comprando las entradas. La gente pasa para entrar a la película de esta noche. Me encanta el cine, aunque no voy muy seguido, es algo muy nuevo y llamativo. Suelto un suspiro desganada viendo a las chicas pasar.

GOTAS DE AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora