Awake

CAPÍTULO XXI

—Vete —le ordenó In-Jae furioso en cuanto lo vio.

Por cómo se miraban, parecía que en cualquier momento iban a molerse a golpes en cuestión de segundos.

—No. Suni, hablemos —me pidió SeokJin volviendo su mirada a mí.

—De acuerdo. Por favor espérame en el auto —me referí a In-Jae.

—No tardes —se alejó resoplando.

SeokJin ni siquiera esperó a que In-Jae se alejara para hablarme:

—¿Por qué estás con él? —me cuestionó en un tono exasperado mientras fruncía el ceño.

—Se ofreció a llevarme a mi casa.

—Sabes que yo puedo hacerlo. Él no tiene porqué estar contigo.

—Ya le dije que sí.

—Yo soy tu novio Suni, no él. ¿Por qué siempre que te veo estás con él?

—Es mi amigo —bufé nerviosa y cambié de tema drásticamente—. Despierta de una vez SeokJin, no puede seguir así, estoy cansada de todo esto.

—¿Q-qué es... qué es "todo esto"? —tartamudeó.

—¿Qué, no te das cuenta? Desde que decidimos estar juntos, solo hemos tenido problemas. Sin contar que involuntariamente estamos perjudicando a terceros con nuestra relación.

—¿De qué estás hablando?

Casi perdiendo la paciencia, comencé a caminar de un lado a otro mientras movía mis manos.

—La forma en que manejaste las situaciones no fue la correcta. ¿No ves que también hemos involucrado a terceros? Lo que menos quiero en este mundo es que tú, y el resto de los chicos, tengan problemas por mí.

Siguió frunciendo el ceño, y su voz se hizo más grave.

—Hay algo que no tienes muy claro, Suni. Lo que hice fue por los dos, y a mí en particular no me interesan mucho los terceros.

—Eres tú el que no tiene las cosas claras, sólo decides impulsivamente —me paré frente a él y lo miré—. ¿Por qué hiciste eso? ¿Por qué tuviste que exponernos de esa forma en un vivo? Gracias a Dios que el Staff pudo eliminarlo antes que saliera al aire, pero incluso así, tu trabajo, el de los chicos y hasta el de In-Jae están comprometidos.

—Entiéndeme a mi también, Suni. Yo también estaba cansado, ¿o crees que me gusta que me inventen amoríos con otras personas que no sean tú? Sé que fui impulsivo, pero llegó un punto en el que me harté.

—¿Y crees que para mí es fácil leer esos rumores y recibir los mensajes de odio? Sin contar tu ausencia —Jin negaba con su cabeza.

No quería hacer contacto visual con él porque sabía que si lo hacía, mis ojos iban a soltar todas las lágrimas que trataba de contener.
Suspiré con resignación, como dando por terminada la conversación y dije:

—Ya no puedo seguir de esta manera Jin, de verdad no puedo —no podía creer lo que acababa de decir.

Un corto silencio se hizo presente, como si ninguno de los dos entendiera lo que estaba pasando. Me miró confundido y su respiración se aceleró.

—No, no digas eso. Sabes que he hecho todo lo posible para protegerte. Quizás no lo hice muy bien, pero me esforcé.

Yo seguía evitando su mirada, tratando con todas mis fuerzas de no correr a sus brazos.

—Cada vez que tengo tiempo libre espero pasarlo contigo, con nadie más que contigo, Suni. Todo el día te pienso y te extraño. Entiende que no ha sido fácil para mí tampoco —continuó.