Twin Flames

Capítulo 17

Capítulo 17

Los chicos contaron sus aventuras durante toda la tarde mientras todos los presentes oían atentamente. Rebeca se puso de pie y se apartó del grupo. Abrió la puerta y salió al estacionamiento un momento. Deseaba estar a solas luego de todo lo que había ocurrido. Recién comenzaba a tomar conciencia de lo sucedido.

Hyun Joong vio de rojo como se retiraba la chica, dejó pasar un par de minutos y luego se puso de pie para seguirla. Al salir, la divisó afirmada al lado de una viga, con los brazos cruzados y con la vista perdida en el suelo. Caminó lentamente hasta donde ella estaba. Rebeca, al sentir pasos detrás de ella, volteó. Vio a Hyun detrás suyo e intentó sonreírle.

“Estás bien?”, preguntó el chico tímidamente, deteniéndose tras de ella.

“Si, eso creo.”, titubeó Rebeca, volteando hacia adelante nuevamente y bajando  la mirada.

“No lo estás… Es por todo lo que pasó, verdad?”, preguntó el chico.

Rebeca volteó hacia él y puso sus manos en la cintura.

“Estoy cansada! Aburrida de esto! Ya no lo soporto! Intento parecer fuerte pero… no lo soy!”, gritó ella y sus ojos se llenaron de lágrimas.

Hyun Joong la observó en silencio. Luego dio un paso hacia donde estaba ella y la abrazó en silencio.

“Si lo eres! A veces creo que mucho más que yo. Pero ya pasó! Ya estamos todos juntos! Ya está todo bien! Ahora sólo debemos ser más precavidos!”, susurró él mientras la mantenía entre sus brazos.

Rebeca se soltó de él y continuó llorando.

“No, Hyun Joong! No está nada bien! Qué no te das cuentas? Parecemos prisioneros!”, comenzó a subir la voz ella.

“Pero tú lo dijiste! Tenemos que agradecer que hoy estamos bien, que hoy salimos de esto… Ya veremos mañana! Lo importante es que… estamos juntos!”, añadió él, bajando ligeramente la voz en las últimas dos palabras.

Rebeca dejó de llorar, se secó las lágrimas y levantó la barbilla.

“Es verdad… Yo lo dije. Tienes razón… pero…”, susurró la chica.

“Pero nada! Estamos vivos, estamos juntos, tú y yo! Hay algo mejor?”, insistió él mirándola fijo y sonriéndole dulcemente.

Rebeca sonrió levemente, algo más calmada. El chico la imitó y se quedó enfrente de ella.

“Y eres muy testaruda! Me prometiste que si no volvía me irías a buscar! Y así lo hiciste! Si no fueras una chica tan fuerte, no lo habrías hecho! Debieras haber visto como lucías cuando llegaste a rescatarme, como una heroína de una película de acción!”, bromeó él.

“jajajaja… No me podía quedar de brazos cruzados!”, explicó ella sonriendo también.

“Eso me agrada. Verte de nuevo sonreir.”, agregó Hyun Joong y caminó un paso más cerca de ella.

Rebeca lo miró fijo. Los grandes ojos oscuros del chico, fijos en los de ella le provocaron un vuelco en el estómago. El chico continuó acercándose al rostro de ella. Era evidente que se iban a besar y ninguno de los dos haría nada por impedirlo. Un par de segundos más y sus labios se rozarían por primera vez. El corazón de Rebeca latía a mil por horas. Sin duda tenía miedo, miles de contradicciones pasaban por su cabeza, pero su corazón sólo lograba hacerla desear ese beso como nada más sobre la faz de la tierra. La chica cerró los ojos y levantó ligeramente el mentón para darle más facilidad de llegar hasta ella al chico.

Rebeca permaneció con los ojos cerrados, anhelando el contacto de los labios de él. Hyun Joong sonrió, al observar que la chica esperaba por él. Acercó suavemente sus labios a los de ella para apenas rozarlos en un sutil beso que no duró más de un par de segundos, tiempo necesario para hacerlos a ambos asegurarse de los sentimientos para con el otro.