Nora
— Oye, mírame — le dije con el corazón en la mano.
— Hiciste lo que creías correcto y nadie te puede tratar de criminal por eso, yo no lo haré, la defendiste, ella tomó su decisión y no te puedes culpar por ello. —
Me dolía el pecho, saber todo lo que había sufrido, pensar que él creía que yo lo alejaría de mi hijo por esto, había sufrido tanto, él no tenía por qué cargar ese peso.
— Eso dijo el juez — me miró con miedo — pero yo sí me sentía culpable, y necesita pensar que había pagado por eso, estuve un mes en prisión, mientras se hacían investigaciones, después el juez me declaró inocente y salí. Pero yo sé que no soy inocente Nora, y entiendo si quieres huir y alejar a ese pequeño de mí.
— Escúchame este pequeño y yo, no nos iremos a ninguna parte, porque yo jamás te juzgaré por tu pasado, menos después de todo lo ocurrido, tu madre tomó una mala decisión, nuestras familias no son las mejores. Pero nosotros le daremos la mejor a nuestro pequeño.
Apoyé su frente en la mía y lloramos por un momento.
El timbre sonó y ambos nos limpiamos las lágrimas, abrí la puerta y vi a un hombre.
Lo hice pasar y se presentó como Rigo, me contó lo ocurrido y se marchó.
— Había olvidado que lo había traído — dijo a modo de disculpa, me acerque a él y le abrace y llore en sus brazos.
Todo era tan triste y lamentable, había defendido a su madre y ella le había pagado suicidándose y más encima dejando claro que él era el culpable.
— No llores princesa — me limpie las lágrimas, no quería que se sintiera peor.
Fui a cambiar mi ropa, me puse un peto y un chándal. Mi abdomen estaba levemente abultado, él estaba en sillón con el teléfono en mano.
Me acerque a él y le abrace con una sonrisa, no sabía si había lo correcto, pero ahora más que nunca quería estar ahí con él, logré ponerme en su lugar, no es fácil reconocer lo que te atormenta por años.
El respondió mi abrazo.
— Puedo hacer un rico almuerzo para eliminar la tensión — Asentí y el comenzó a cocinar, el olor comenzó a llenar el departamento, fui a ver que cocinaba, y me quedé observándolo desde la encimera, le amaba como nada, y no podía evitar sentir que le había recuperado. Habían sido solo unos días lejos, pero me sentía hundida, todo en el embarazo se aumenta. Mis emociones, sensaciones e incluso las molestias, las náuseas esos días que no estuvo en casa fueron horribles. Pero desde que Cris está aquí de vuelta ese malestar desapareció.
Nos sentamos a la mesa a comer y el ambiente aún estaba tenso, no quería que se marchase, no me había sido infiel. Por lo que veía innecesario que volviese a irse, le quería aquí conmigo por siempre.
Terminamos de comer y nos levantamos de mesa, abrí el refrigerador y tomé la crema batida y me acerque a él y le ofrecí, unos de mis antojos era comer esta crema como si no hubiese mañana, me hecho un poco en la boca y la comí.
— ¿Seguro que no quieres? — insistí y él negó. Sabía que se estaba cerrando a la posibilidad de quedarse, y tome medidas desesperadas para situaciones desesperadas.
Hoy cerraríamos aquel ciclo que lo atormentaba.
Me desvestí y vertí crema en puntos específicos de mi cuerpo, caminé con cuidado de no derramar la crema. Y camine hacia el comedor, él estaba de pie, apuntó de tomar sus cosas e irse.
Me apoyé en el cuadro de la puerta y dije de forma sensual.
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Dentist Heart- Spin-of Trilogía Imposible. Sin Editar
Teen FictionSus vidas se cruzan, cuando ninguno esta preparado para el amor. él esconde su pasado, ella arrranca del suyo. mezclar sus vidas sera el resultado de un pequeño caos. ¿que puede salir mal? ¿estarán preparados para lo que sucederá entre ambos? " cont...