CAPÍTULO 19

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Nora

Habíamos tenido una cena increíble, Cris se preocupaba mucho por mí. Pero no podía evitar recordar que una vez ya había entregado mi corazón y había salido lastimada.

De hecho, creo que lo entregue dos veces, una a aquel hombre que me engaño con su mejor amiga, ese fue el peor, creía que me amaba, vivía en una mentira, por lo menos Cris siempre fue un cabrón, con él no tenía esa ilusión de que todo sería como un cuento de hadas, siempre fue sincero, siempre dijo que cargaba algo.
Aún no puedo creer lo que cargo todo ese tiempo, cuando me lo confesó, no niego que quise correr, intente no demostrarlo, Cris ya tiene suficiente con su oscuro pasado, como para que yo intente ponerlo aún más negro, por eso intente buscar la luz, él no sabía lo que ocurriría con su madre. Y no puedo evitar reprochar aquello, que clase de madre se planta delante de su hijo, el cual la defendió a decirle que todo es su culpa.

— ¿En qué piensas princesa?

— Solo pienso en la universidad.

—¿Te complica algo en específico?

— No, es solo la ansiedad supongo, y las hormonas.

— Todo saldrá bien, estoy aquí para cuando me necesites.

— Lo sé— me acurruque ne su pecho.

El acarició mi espalda, y dormí plácidamente, al menos lo más cómoda que me permitía el embarazo, el abdomen ya abultaba y debía buscar una posición cómoda a media noche, Cris jamás se quejó. Pero veía sus ojeras al día siguiente, pero agradecía que no dijese nada.

***

Estaba en la clínica atendiendo mi último paciente, era una de las altas importantes, con este paciente lograba cerrar varios de los requisitos, sólo me faltaba la firma de mi tutor, que obviamente no era Cris, él se mantenía alejado de mis calificaciones para evitar todos los malos comentarios.
El paciente se levantó mientras estaba envuelta en mis pensamientos, y no vi el movimiento del braquete (mesita del sillón dental), retrocedí al sentir el dolor en el vientre, como si una aguja atravesará de forma brusca aquel sitio.
Aguanté el dolor y me despedí de manera amable del paciente.
Camine hacia los baños y respire calmada, había sido solo un golpe. Y no quería alarmar a nadie. Por lo que pase mi día intentando ocultar aquella punzada, Cris estaba bastante paranoico como para contarle que me había golpeado, y supuse que aquel dolor desaparecería.

Aquel día llegué a casa a estudiar y me dormí rápidamente para que no notase mi malestar.

Al día siguiente el dolor persiste, pero con menos intensidad, supongo que desaparecerá de poco, aquel dolor me hace estar distante de Cris, por lo que un día llegó a casa y él tiene preparada una cena nuevamente, sonrío, e intento que no me note lejana, aquella cena fue distinta, conversamos de nuestros planes, de lo importante que era este pequeño ser para ambos.

Cris se encarga de recoger la mesa y limpiar todo mientras me recuesto en la cama, él llega y me avaricia de forma tierna, acaricia mi abdomen abultado.

—Necesito contarte algo... Me giro lo observo fijamente.

—No me asustes Cris.

—No es sobre mí, es sobre Dann y Ale, es solo que los veo avanzar muy rápido, Ale es tu amiga, también la mía, es solo que quiero que le digas que por favor no acelere, que vayan con calma, nadie los apresura.

— Tú sabes algo que yo no, ¿cierto?

— Dann es mi mejor amigo Nora, ambos sabemos que no le dirá a Ale lo de la posibilidad de ser padre.

Dentist Heart- Spin-of Trilogía Imposible. Sin Editar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora