Capitulo 20

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La joven peliblanca corría por los grandes caminos y después de un rato la joven llegó a la gran entrada de aquel pilar con la respiración ajitada.

-a.... A... A... Ah-respiro muy ajitada-c-creo que llegue a tiempo....

Su voz salió muy cansada y entro suavemente al lugar y después de un momento entraste y viste todo alrededor.

Todo estaba en completa calma, incluso apareció un pequeño niño al verte entrar, era muy parecido a rengoku pero más pequeño.

-Ehhh hola pequeño..., se que es raro... Pero sabes donde puedo encontrar a rengoku para entrenar-aquel muchacho índico hacia una dirección y yo simplemente le agradecí con la mirada y corrí hacia ese lugar.

-Oh joven señorita ah llegado a tiempo! - habló con emoción aquel pilar mientras sonreía incluso con los ojos.

-Perdón igual por la demora... - se disculpo incluso si llego con tiempo.

Luego de muchas explicaciones y disculpas extrañas, empezó aquel entrenamiento, fue brutal pero igual no querían detenerse, era un entrenamiento capas de matar a una persona normal,pero para ellos era simplemente una competencia de felicidad.

-AHHHH!! - grito rengoku mientras levantaba aquella espada de madera en el aire

-AHHHHH!! - grito fuertemente nuestra protagonista mientras hacía algo parecido pero desde el suelo.

Ambas espadas de madera sonaron al contacto con la otra, incluso ambas espadas se empezaron a romper por los repetitivos y rápidos golpes que ambos jóvenes daban.

Aquellos muchachos simplemente sonreían ya que su pelea más que entrenamiento paresia un juego para ambos.

-Rengoku, si continuamos nos quedaremos sin espadas de madera-Hablo nuestra joven muchacha mientras apuntaba a un montón de espadas complemente rotas en el suelo, ya que sus peleas eran fuerza y movimientos para todos.

-Oh!, creo que tienes razón pequeña-contestó aquel hombre con una gran sonrisa mientras se limpiaba el sudor. - Eres muy buena!.

-no es para tanto-le respondió a rengoku con una gran sonrisa-Hoy fue un entrenamiento muy divertido, debemos repetirlo pero creo un poco más calmado-Hablo mientras miro todas las espadas de madera que ambos rompieron.

-Ten por seguro que cuando volvamos a luchar, no nos faltarán espadas Jajaja-comenzó a reír el joven,logrando contagiar aquella risa a nuestra protagonista.

Luego de su entrenamiento la joven peliblanca camino en dirección a la finca mariposa, cuando vio cómo todo el mundo corriendo de un lado a otro.

-Kanao qué es lo que sucede-viste a kanao dando algunas órdenes a las personas.

-Tenemos que ir a él monte, hay una luna y debemos rescatar a las personas, shinobu dijo que ti vienes conmigo-Hablo en su tono de manera suave.

-entendido, me cambió y nos vamos-corrió hacia adentro, se cambió de ropa y cuando estaba apuntó de salir vio como las pequeñas niñas tenían una espada.

-S... Señorita _____ llegó su nueva nichirinto, espero que le ayude-digieren las 3 al mismo tiempo mientras tu afirmabas la nueva espada y luego la abrió.

La espada cambió de color tomando un tono morado, con forma de tinta, era hermosa y a la vez letal.

-Gracias pequeñas, cuando vuelva espero que estén listas para ayudarnos-se despidió y siguió a kanao a su nueva misión.

Kanao te explico que giyu y shinobu se fueron antes, a sí que ustedes simplemente tenían que ayudar a los heridos y proteger a los demás a sí que tu simplemente te preparaste mentalmente.

Luego de unas horas, ayudando a todo el mundo, no estabas tan acostumbrada a ver los cuerpos de personas que eran más jóvenes que tu morir de esta manera, a sí que cuando fuiste a ver los cadáveres generaste una reverencia ante ellos, los cuales perdieron su vida valientemente.

-Espero que sus almas lleguen a reencarnar y sean felices-hablaste ante los cadáveres y fuiste a ver más lejos ya que sentías un olor mucho más fuerte.

Caminas te entre los grande árboles y encontraste cuerpos ya descompuestos, tu corazón se partió en mil pesados, ya que si llegaban unos minutos antes Talvez las bajas no fueran tan grandes.

Mientras aquella muchacha miraba los cuerpos un ser la amenazaba desde la oscuridad.

Momentos Rotos [Tomioka Giyu Y Tú] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora