Momentos Rotos [Tomioka Giyu Y Tú]

Capitulo 30

Aquella muchacha de bellos cabellos blancos, miraba la luna como todas las noches... Entre los demonios se corrió el rumor de la asecina de demonios que brillaba como la luna, siendo letal y silenciosa, pero la persona que más se interesó de aquel rumor fue el más poderoso de todos los demonios, ya que sentía que la mujer que según el sería solo de él... Estaba siendo más fuerte para ir a su lado,la locura está subiendo por aquella muchacha.

La muchacha cumplía con lo que le pedían, ella tenía una misión... Destruir a Muzan... En este momento se encontraba en la finca mariposa ayudando a las chicas. Aio, miraba como aquella muchacha de largos cabellos blancos ayudaba sin importar nada.

-Segura... Que quieres ayudarme-Hablo aquella muchacha de cabellos de coletas.-deberias...estar con los demás...ya sabes en misiones...

-Pará qué... Si ustedes igual son importantes-Hablo con ternura la joven generando que la más joven se sonrojara. - Ustedes son igual de importantes que todos los demás cazadores.

Una suave sonrisa salió de sus labios para luego ver a su cuervo el cual tenía un pequeño mensaje en su pierna, lo sacó con lentitud y empezó la lectura... Su voz no salia de su boca... Para luego mirar a aoi.

-H-Hay que preparar... Camas y mucha medicina-Hablo un tanto nerviosa-Los chicos que fueron con el pilar del sonido están heridos al igual que el-Aoi dejó caer la ropa de aquella canasta y empezó su trabajo rápidamente junto a la peliblanca, sabía muy bien que eso era malo y la más culpable era que ella debió a ver ido en ver de los demás,pudo a ver evitado todo eso...el cuerpo de aoi no reaccionaba.

La muchacha de cabello blanco como la luna se percató de eso y luego la tomó de los hombros y generó que la mirara a los ojos.

-Aoi, reacciona tu no tienes la culpa de nada de esto-hablo segura para luego sonreír, la joven aoi se sorprendió demaciado pero sus ojos se aguaron al escuchar aquellas palabras-Ahora debemos prepararnos y cuidar a todos, ese es nuestro trabajo ahora y debes sentirte orgullosa.

Aquella muchacha de cabello blanco corrió por aquella finca preparando a todos, aoi por primera vez en años se sintió feliz de simplemente ayudar a los heridos,sus lágrimas de alegría fueron borradas de sus ojos por ella misma para ayudar a preparar de todo junto a la chica peliblanca y cuando llegaron los heridos ellas fueron las primeras en ayudar a todos, se sorprendieron mucho al ver todo el daño de sus amigos pero tenían que ser fuertes.

Las horas de martirio fueron demaciadas pero al saber que todos se encontraban sanos y salvos un suspiro de cancansio salió de sus labios, pero fue remplazado por las risas de ambas, verse de esa manera les generó risa.

Mientras ellas estaban riendo aquel demonio llamado Muzan estaba más que enojado, una de aquellas lunas no pudo derrotar a aquellos insolentes... Los cuales impedían que el ser asercara a la peliblanca, su rabia fue tanta y mató a varios demonios sin pestañear y se enojo mucho más al entérarse que aquella muchacha que según el, debía ser de él estaba en una relación con otro pilar, sus nervioso estában más que descontrolados.

-Maldición!!! - fue el único grito que se escucho de Muzan antes de que aquellas puertas impulsadas por un demonio lo llevarán a otro lugar.

Su plan tenía que empezar rápido antes de que alguien más la alejara de él.