Narra Alicia.
¡Acabamos de llegar a China! O Dios estoy tan emocionada que voy a gritar, saltar de felicidad.
Estábamos en el taxi de ida para nuestro hotel, mientras yo revisaba un folleto de lugares que podríamos visitar durante nuestra estancia aquí en China.
Ya me había decantado por unos lugares bastante extravagantes para los turistas. Hoy descansaremos del viaje y mañana a primera hora saldremos a recorrer la ciudad y hacer de todo. Teníamos que aprovechar las vacaciones.
Según Allison, nos quedaremos aquí en China unas semanas aproximadamente. No teníamos pasaje de vuelta, ya que no queríamos estar presionados con el tiempo, y estar calmados durante nuestra estancia en China.
- Llegamos - me dijo Victoria saliendo del coche y hartando las maletas.
Estábamos en frente de un hotel, es bastante lujoso, no teníamos que coger el más caro y famoso de la ciudad.
- ¿Por qué este hotel? - le pregunté ya entrando las últimas, mientras que los chicos estaban delante.
Ella me miró con duda.
- Lo digo porque parece muy de 5 estrellas - aclaré.
- Ahh, por eso. Bueno, quería que estuviésemos cómodos todos, además Allison eligió el hotel. Yo solo le dije que buscará uno que tuviera buenas vistas y un gran servicio de habitaciones - dijo sonriendo y yo reí por sus ocurrencias.
- Te encanta comer eh -
- Sip, sobretodo mi plato favorito - dijo y la sonrisa no se le quitaba de la cara.
- ¿Y cuál es el afortunado? - pregunté siguiéndole el juego.Ella rió y luego me miró con una sonrisa pícara.
- La afortunada soy yo por tener ese plato. - me miró unos segundos - Tu eres el entrante. -
No pude evitar sonrojarme cuando dijo eso.
Uffffffff. No. No puedo pensar de esa manera. Pero ella lo hace conmigo, no veo problema.
- Quizás puedas probar ese plato después - dije pícara mientras me adelantaba y cogía la llave de nuestras habitación.
Ella solo se me quedó mirando con los ojos muy abiertos.
Narra Victoria.
¿Qué acaba de pasar?
¿Dónde está la Alicia inocente que conocí?
Bueno, no voy a indagar más en el tema.
Llegamos a la habitación del hotel, era grande y espaciosa. Había una cama de matrimonio, varios muebles y armarios, y algunos mini sofás esparcidos. Y como no, no podía faltar el gran ventanal que daba visión a toda la ciudad.
Una vez que visualice la cama, me acerqué mientras dejaba las maletas por el camino y me tiré de cara en ella.
- ¿Estás cansada? - preguntó Alicia.
Yo solo asentí con la cara sumergida en colchón, me estaba quedando sin respiración y saqué mi cabeza de ahí. Y respiré hondo, dándole una larga calada al oxígeno.
- ¿Quieres hacer algo? - preguntó otra vez.
- Quiero hacer nada. O... - me di la vuelta y la vi, estaba parada con una larga camiseta mía. Creo que solo llevaba la ropa interior debajo de esta. - Puedes venir conmigo, si quieres claro - dije y estiré los brazos a su dirección.
Ella sonrió y me abrazó, ya acostadas en la cama.
Me besó, al principio fue un beso tierno, donde solo expresábamos nuestros sentimientos. Pero se fue convirtiendo en un beso más apasionado, lleno de intensidad y deseo.
Ella estaba sobre mí, sentada o casi acostada, pero estaba. Pasé mis manos por su cintura, delicadamente mis manos iban detallando sus puertas hasta llegar por debajo de la camiseta que llevaba puesta. Su piel se erizó al sentir mi tacto, y sonreí al acto. Le di la vuelta a la situación, quedando esta vez encima de ella. Sus manos estaban en mi cuello ejerciendo presión, sus labios sobre los míos, nuestras lenguas se entrelazaban, y de un momento a otro. Ella quito sus manos de su lugar he hizo desaparecer mi camiseta. Hice lo mismo con la suya, y... ¿Cómo escondía ese cuerpo debajo de una tela? Tan perfecto, detallando al milímetro, una diosa griega ante mis ojos. Las dos hicimos contacto visual, y si sonreímos a la vez, volviendo a realizar. Aunque la verdad, se sentía como en un sueño, mis manos recorrían su cuerpo, mis labios su cuello, bajaban por su pecho, levemente mordía, chupaba, jugaba con ellos. Levanté la mirada para conseguir una aprobación para seguir, y lo que escuche me dejó helada.
- Sigue... - ese suspiro al decirlo, me dio toda la aprobación que necesitaba.
Mis besos húmedos bajaron por su abdomen descubierto, y mis manos hicieron el amague para desabrochar su sujetador, para después dedicarme a masajear sus pechos, ella soltaba varios suspiros.
Retiré su última prenda. Subí para besarla, y con una mano apoyada en el colchón, la otra hacia su trabajo en la zona que requería más atención... En círculos aquel botón, y entré dentro de ella, los gemidos inundaban la habitación, y ya se hacia el aire un poco más pesado.
Mis besos callando sus gemidos, mi mano salía y entraba de ella, Alicia acaciaba mi centro, haciéndome estremecer.
Para aquel entonces su mano ya se encontraba en la misma posición y haciendo exactamente lo mismo que la mía, pero en mí. Las dos nos dábamos el placer, gemiamos al unísono y todo era rápido y ardiente.
Nunca pensé que pasaría toda la noche probando cada una de las posturas posibles, y tampoco pensé que fuera Alicia quién tomaba la iniciativa en cada auna de ella.
Si, me pasiveo.
Y me encantó.
Después de varias horas de gemidos, suspiros y varias cosas más, nos quedamos dormidas abrazadas por el esfuerzo realizado.
- Te amo - la escuché susurrar.
- Yo también te amo - respondí y creo que se sorprendió al ver que si la había escuchado. Y se apegó más a mí.
*************
Sé que es muy, MUY corto.
Como todos...
Pero Bueno... Solo quería poner esa escena, que más o menos es lo importante en la vida de los personajes... Pero en fin... Sorry por la pésima narración, pero no se me da bien escribir este tipo de escenas. Disculpen mi inocencia.
P.D= No me odies por lo que va a venir... Se viene drama.
One kiss...
By; V.V.C
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El intento.
RomanceUna policía de Nueva York, y una estudiante de Bellas artes... ¿Qué puede salir mal? A través de los ojos se esconden misterios, dos colores sin ninguna relación. Pero a veces los secretos más ocultos, salen para salvar una vida, pero quizás ahora...