Capítulo XVII

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Para sopresa de su día, Tony está en la cocina. Un vistazo de pies a cabeza, lleva medias, una especie de pants que aprieta su trasero y se afloja en sus pantorrillas. También lleva una camiseta blanca, una buena elección, la falta de mangas resaltan los músculos de sus brazos.

- Buenos días Anthony Stark.- le ha dado un ligero susto.- ¿Cómo amaneciste?

- Muy bien gracias, ¿ustedes como están?.- les apunta con la espátula.

- De maravilla.- pura burocracia.- Que suerte la mía de encontrarte tan, - solito, indefenso, en pijama.- temprano.

- Tu dirás para que soy bueno.- si Peter hace la lista, ya no le podrá dejar ir de esa cocina.- ¿Peter?

- Si, si.- concentrate Peter.- Hoy voy a usar tu tarjeta, para que le avises al banco y no me vayan a detener.

- Jarvis, toma nota de eso.- en lo que la IA toma nota, él también toma nota.

Tony está preparando panqueques, tiene la cafetera encendida y baila en el espacio que hay de la cocina a la isla. Peter puede percibir el buen humor que el genio tiene, pero también siente como su presencia le pone algo nervioso.

- Deja de verme así.- ¿así cómo? Solo está viendo cómo vierte la mezcla en el sartén y bebe de su café.-

No responde, no tiene ánimos de palabras hoy. Tiene más de una semana sin ver a su esposo, que se parece demasiado al hombre que ahora hace el desayuno, está embarazado y hormonado.

- 'The sweetest release might take a while".- le canción le trae muy buenos recuerdos y casualmente ha sonado cuando entro a la habitación.- ¿Has pensando lo de la otra noche?.

- ¿Nunca te cansas?.- no, nunca. Menos si hay un Tony Stark de por medio.

- Para desgracia tuya,no.- con sus manos se impulsa y de un brinco esta sobre la encimera, aún lado de Tony.- ¿Te has acostado con un hombre?

- ¿Pero qué cosas dices?.- no, no la hecho. Lo puede ver en el rubor de su rostro y la dramática mano sobre su reactor.- Dejame-

- Ya. Ya me diste respuesta, no expliques más.- en los nerviosos movimientos de Tony, se ha manchado un poco la punta de su dedo con algo de masa para panqueques.- ¿Eso también te asusta?

- ¿Ahora de qué va tu conversación?.- de muchas cosas.- ¿A qué quieres llegar?

- A la raíz de tu miedo.- de hecho no, quiere otra cosa. Más carnal.- Debe haber una razón de tu miedo de salir con Peter.

- ¿Qué no ayer me dijiste que Peter no me merecía?.- si, lo dijo. Pero es que, si baja un poco sus estándares.-

- Cambie de opinión.- los pants y esa condenada cintura te han ayudado, Tony Stark.- Ahora te ofrezco mi ayuda.

- Puedes guardarla. No la necesito.- pero Peter no conoce que es un no.- Yo sé lo que hago.

- ¿Y qué se supone que estás haciendo?.- quiere estar concentrado en la respuesta, pero no puede, Tony sigue sin limpiar esa pequeñísima mancha y le está comenzando a hacer ruido.

- No sé si no te lo han dicho antes, pero yo te lo diré.- muy bien, se ha puesto frente a él.- Eres un metiche.

- Otros me llaman Cupido.- su esposo ya le ha llamado así. No le hace problema. Solo quiero hacer las cosas fáciles, para ti.

- Entonces deja de meterte.- ¿qué cosa? Porque esta por abrir sus piernas y tomarlo prisionero entre ellas.- Puedo hacer las cosas yo solo.

Sus piernas se mueven rápido, tanto, que a Tony apenas le da tiempo de poner las manos entre sus pechos, para evitar lastimar su vientre, supone.

- ¿Pero qué carajos contigo?.- está molesto, pero no importa. Sus piernas se cierran más, su fuerte mano sujeta la de Tony, está a unos centímetros de alcanzar su objetivo.

El millonario se ha quedado paralizado, puede sentir la tensión entre sus piernas, le mira y tiene la respiración agitada. Bien.

- ¿Y qué harás si?.- la pregunta queda ahí, rebotando contra los dos firmes pechos.

Peter no pierde tiempo, introduce a su boca el dedo manchado, sus ojos se quedan en los del castaño el tiempo que le toma chupar, descaradamente, ese dedo.

Le suelta cuando ha terminado su cometido, Tony le sigue viendo con la mirada empañada y su labio prisionero de sus propios dientes. Cuando reacciona, hace lo que mejor sabe hacer, huye.

- ¡Hey! ¡Se te quema el desayuno!.- prefiere reír y continuar con la abandonada labor.

Es mejor voltear panqueques que pensar en la caliente escena que ha montado en esa cocina. Jesús, si su Tony le hubiera visto.

Pero, aunque fue todo improvisado, fue un avance, ahora Tony lleva grabado en sus retinas la cara de Peter chupando algo de él. No importa cuál de los hombres arácnidos haya sido.

Tiene suficientes motivos para, por favor, hacer algo.

Tony² [STARKER] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora