El verdadero amor

Capitulo 21

A 18 nunca le gustaron los hospitales de hecho casi podría decir que le aterraban. Las paredes verde claro y las puertas blancas no era algo que le agradaba... ni un poquito, los doctores y enfermeras corriendo de acá para allá, ese uniforme blanco, las batas de los doctores, los gritos de los pacientes... le daba un escalofrió que le hacia pensar una sola cosa: "estas loca dieciocho." No había otra explicación. Pero ahi estaba aunque no estaba sola, los guerrerosZ también estaban en la sala de espera a que saliera el nuevo integrante de la familia Son. Todavía no sabe muy bien como hizo Krillin para convencerla de acompañarlo pero ahi estaba. Ni si quiera le interesaba ese niño o la madre pero si su amigo y sabia que era un momento muy importante en su vida. Giro los ojos mirando la habitación, los integrantes sentados en silencio. Estaba todos menos Bulma quien fue a presenciar el parto como pedido de Milk en reemplazo de Goku ya que Gohan era menor de edad y no le permitieron estar. Miro a su amigo, no estaba menos nervioso que los demás prácticamente se comía los dedos porque ya no le quedaban uñas que morder.

Quería decirle algo para animarlo pero verdaderamente no sabia que decir en momentos como este, no era buena hablando mucho menos de temas que ni sabia de que se trataba. Un parto, tener hijos... estaba segura que nunca averiguaría de que se trata o que se siente. La frustración no tardo en llegar. No era como si quisiera tener hijos pero el saber que seguramente nunca podría porque habían invadido su cuerpo con quién sabe qué no era algo que le alegrara tampoco. Supuso que después de todo lo que paso hasta ahora, estar viva en este momento sin nadie que la persiga para absorberla o modificarla, teniendo una casa ya alguien que se preocupa por ella no podía quejarse. De repente las puertas del salón se abrieron y un grito conocido sonó en toda la habitación.

Es un niño! un hermoso niño!!- Decía Bulma muy contenta limpiándose algunas lagrimas. 

Todos festejaron, 18 se alegro al ver la expresión feliz de su amigo. Parecía que volvía a ser mas él mismo. 

Mas tarde todos volvieron a sus casas arreglando que en una semana celebrarían la bienvenida del pequeño Goten. 

Krillin ansioso estuvo ayudando en la casa de Bulma y en su propia casa preparando algunos adornos y comidas caseras. 18 solo lo acompaño en presencia ya que no sabia hacer ninguna de esas cosas. Una noche cerca del día de la fecha salio de su cuarto a media noche por escuchar algunos ruidos y al asomarse por la escalera noto a Krillin cosiendo y pegando unos adornos con un semblante bastante cansado. Ella no tenia sueño así que decidió acompañarlo al bajar noto que la tele estaba prendida en un sonido ligeramente alto pero sin molestar, seguramente era para no quedarse dormido pero parece que estaba fallando...

Deberías descansar un poco, sino te vas a enfermar.- bajando las escaleras y dirigiéndose a la cocina.

Ohh! 18 no me di cuenta que estabas despierta, te pido disculpas.- sin prestarle mucha atención. Bajo un poco el volumen de la tele. 

Tomo un te helado de la heladera y se sirvió. -Quieres Té enano?.- Mirando por su espalda.

Si por favor, pero caliente, últimamente esta refrescando bastante.- 

Como quieras.- calentó agua y la vertió en una taza con un saquito de té y lo dejo en la mesa donde estaba trabajando el guerrero. 

Porque no sigues mañana? de verdad tienes una cara terrible.- bebió un poco de su té y lo miro.

Es que mañana quería ir a comprarle algo de ropa al pequeño Goten y si el tiempo me daba ya quería llevar todas las cosas a la casa de Bulma.

Paso algo de tiempo después de eso... ella de verdad quería que descansara un poco, lo conocía y sabia que si no descansaba mañana seria un completo desastre y no haría nada de lo que dijo.