En medio de la falsa paz en la que Storybrooke se encontraba tras el regreso de todos del Inframundo, Emma Swan comienza a sufrir terribles pesadillas, ataques y visiones, que la alertan de algún peligro. ¿Será real? ¿O solo su mente jugándole una m...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Mirándose el uno al otro, Regina y Robin esperaron algunos segundos para estar seguros de que Emma no iba a decir nada más. Viendo que la rubia volvía a perder la consciencia, Robin apagó la grabadora del móvil y miró a Regina.
―¿Pero qué fue eso? ¿Una profecía?―preguntó, sin entender
―A primera vista, sí, es lo que parece...―respondió la morena aún intentando asimilar lo ocurrido.
Emma aún estaba desmayada en los brazos de Regina, sin dar señal de que fuera a despertar, la alcaldesa hizo un movimiento circular con una de sus manos.
―Agarra su cabeza y apóyala, Robin...Ahora que ya no está en estado de transe, quizás pueda despertarla con magia. Si no funciona, voy a coger alcohol.
Y así lo hizo Robin, apoyó con cuidado la cabeza de Emma, mientras Regina se restregaba las manos, y de ellas comenzó a salir una luz transparente y débil, fue pasando las manos con cuidado por las sienes de Emma. Tras un momento, finalmente Emma despertó con un sobresalto, desorbitando los ojos, e inspirando fuerte por la boca, como si tuviera un ataque de tos.
―¿Qué ha pasado? ¿Por qué estoy en el suelo? No me digas que...―preguntó, confusa, alternando la mirada entre Regina y Robin.
―Sí, Emma―respondió Regina, preocupada―Has vuelto a tener una crisis, otra alucinación y otro desmayo...
―Ahhh, no...Una vez más no me acuerdo de nada...Solo de...―se acordó del Espectro pasando por su campo de visión antes de perder completamente el conocimiento, y automáticamente dejó de hablar ―Olvida...No recuerdo nada...Ay, mi cabeza―se puso la mano en una de las sienes, y cerró los ojos...El dolor era muy intenso.
Robin y Regina la ayudaron a levantarse, uno por cada brazo. Regina conjuró una magia y colocó su mano en su cabeza.
―¿Mejoró? Si no por completo, tengo remedios en el despacho, puedo ir a buscar.
―Sí, mejoró...Ahora duele mucho menos...Gracias―realmente la magia de Regina la había ayudado mucho.
―Emma...Como sospeché que no te ibas a acordar de nada de lo sucedido, le pedí a Robin que grabara por si decías algo...Y él lo hizo...¿Quieres escuchar?
―Claro.
Robin sacó el móvil y puso la grabación. Los tres escuchaban en silencio y atentos a cada palabra proferida por Emma en su momento de transe.
―Parece...Una profecía...―dijo Emma, intentando asimilarlo y recordando lo que Belle le había dicho sobre los Espectros, que ellos podían intentar comunicarse de diversas maneras, incluso con profecías o adivinanzas.
―¿No te dicen nada esas palabras?―preguntón Regina
―De momento, no...―suspiró Emma ―Pero voy a ver qué puedo hacer para entenderlo...
