*Capítulo 53*

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Los tres mayores miraban con ternura a aquella jovencita de cabellos combinados. No había dejado de llorar por varios minutos (desde que llegó), he incluso si trataban de tranquilizar la con frases dulces está misma solo se ponía peor. Para cuando la calmaron esta tenía su vista en aquella taza de café que le habían entregado. Tenia muchas cosas que decir pero no sabía que el tiempo se agotaba esa misma noche.

Habían pasado demasiadas cosas en ambos lados, tanto buenas como malas, pero el saber que ya nada tenia arreglo les hacía pensar que debían disfrutar esos pocos momentos al máximo.

Koma: ¿Ya estas mejor? -pregunto con una sonrisa y ella asintió.

Irimi: Por cierto ¿Qué son esas cajas? -esta vez pregunto ella notando las cajas pequeñas que se encontraban en una mesa del lugar.

______: ¿Uh? -miro ella la mesa y no evitó el levantarse para tomar aquellas cajas en sus manos y volver al mismo sitio- Son unos regalos para ustedes -respondió- Koma esta es tuya -aviso entregandole la caja color crema.

Al abrir aquella caja esbozó una sonrisa al ver aquel objeto y sobre todo por el dije. Sabia que le recordaba a los viejos tiempos aquel dije y sin contar que se parecía mucho a él.

______: Irimi esta es para ti -esta vez le entrego una caja color pastel oscuro

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______: Irimi esta es para ti -esta vez le entrego una caja color pastel oscuro.

De igual forma la abrió con la misma reacción que su amigo. No esperaba tal acción, y mucho menos la visita de su niña. Si, porque éso era aquella chica, su niña, su pequeña, alguien a quien le tomo mucho cariño como para dar su vida por ella. No pensaba que en su último día había llegado una razón para pelear, una luz donde haya oscuridad.

______: Yoshimura-san

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______: Yoshimura-san... -al final lo miro entregando le una al igual que todos- Usted es quien me brindo apoyo e incluso me dijo sobre lo de mis padres, gracias. En verdad gracias.

Dicho aquello vio como el nombrado tomaba la caja, pensando en si le gustaría o no, pero al ver su reacción no dudo en que había hecho lo correcto.

______: ¡Tengo una idea! -dijo en alto para sacar su celular de su bolsillo e ir de forma rápida a una mesa que estaba en frente. Cuando dejo el teléfono allí, giro para ponerse en medio de todos- Vamos, una foto con sus regalos. La foto se va a tomar en 5... 4... 3... 2...

El flash indico aquella señal de fotografía, y así fue una de tantas fotos que tomó. Quería tener aguardado cada recuerdo posible en aquel aparato, cada recuerdo de miles que posiblemente habrían. O solo eso pensaba ella misma, que no se daba cuenta de la tormenta que se aproximaba.

______: ¿Qué harán esta noche? -pregunto mientras observaba las fotos.

Los tres se miraron esperando decir algo, tenían que mentir, era lo único que podían hacer. No quedaba de otra, decir la verdad y ver como alguien importante quiere intervenir en algo que posiblemente no tenga arreglo, sería perder una vida valiosa.

Koma: Nada -respondió- ¿Por qué preguntas? ¿Acaso nos invitaras a tomar otra taza de café? -bromeó.

______: Claro, ¿Por qué no? Después de todo quiero volver a retomar el tiempo perdido con ustedes -comentó y miro el reloj del lugar- Ya es tarde. Debo de ir a casa, cuando acaben del trabajo pueden ir a mi casa, ¡Podemos jugar un juego de mesa! También ver películas y mucho más -su alegría les ponía triste a los demás, pero ¿Qué podían hacer? Solo mentir.

Koma: Me parece perfecto, ahora ve a casa y prepara todo. Nosotros aun tenemos clientes porque atender.

Ella asintió y les dio un abrazo a cada uno, un último abrazo que podían disfrutar. En el momento en que ella salio sintió de nuevo esa sensación de que alguien la observaba. Decidió ignorar lo y solo camino de forma rápida a su casa para empezar a preparar todo.

A medio camino sintió ese gran pánico cuando noto que no llevaba su teléfono. ¡Lo había olvidado en la cafetería!. Freno de golpe y regreso a la cafetería, no quería perder aquel objeto, después de todo tenía los únicos momentos donde arreglo su desastre.

En cuanto llego sus ojos se abrieron de par en par al ver el montón de cadáveres en el suelo, al igual los charcos de sangre que había por cualquier parte. ¿Qué había pasado? ¿En que momento sucedió?. En su mente ocurrían miles de cosas malas, así que apresuro el paso siguiendo a algunos soldados que iban a una dirección en específico.

Quería ayudar, no quería ser un estorbo mucho menos perder a quienes eran su única familia. Pero en cuanto más pensaba eso más eran las pocas probabilidades de estar en pie. Justo en el momento en que iba a llegar, solo vio a aquellas dos personas que utilizaban los objetos que ella misma les obsequió, pero tan solo llegó fue tacleada contra el suelo frío por una persona que le estaba matando con la mirada.

Ayato: ¿A donde crees que vas? -pregunto con tono neutral- Solo morirás al poner un pie allí mismo.

______: ¡No lo haré! -respondió con enojo al mismo tiempo en que se trataba de levantar. No podía, el se encontraba encima de ella mientras me dejaba caer todo el peso, no quería dejarla ir y era sencillo, si lo hacía sabia que la iba a perder y no deseaba eso, para su única amiga- ¡Ayato necesito ayudarlos! ¡No pueso dejarlos solos!.

Ayato: Ya dije que no idiota -suspiro poniéndose de pie para mirar la a ella igual copiar su acción- No voy a permitir que hagas algo estúpido y que mueras en vano.

_______: ¡En vano o no me vale un carajo! -gritó ya cabreada y triste a la vez- ¡E-ellos son lo único que tengo! No quiero perder los por nada del mundo, y si muero en el intento

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_______: ¡En vano o no me vale un carajo! -gritó ya cabreada y triste a la vez- ¡E-ellos son lo único que tengo! No quiero perder los por nada del mundo, y si muero en el intento... ¡¿Qué más da?! ¡Prefiero morir así a no hacer nada!.

Ayato: En verdad eres una idiota... -sonrió. Pero esa misma sonrisa se borro cuando corrió hacia ella metiéndole un golpe justo en el estómago. Aquello hizo que la chica callera al suelo quejandose del dolor, pero no había opción, no había otra forma- Ahora, será mejor que te quites esa idea de la mente y de que te vallas de aquí. Aogiri atacara todo distrito 20 y tu padre no te quiere metida en esto, el sabe perfectamente lo que trataras de hacer por lo que una bobería tuya, sería traición.

_______: Traicion o no... -hablo con dificultad- No los dejare solo -afirmo poniendo se de pie- No volveré a correr -lo miro con enojo- No dejare que ellos mueran a manos de otro seres que también son iguales a nosotros... -apretaba sus manos con fuerza sintiendo aquellos dos tentáculos salir de la parte baja de su espalda- Yo voy a salvar los, ¡Incluso si debo de matarte a ti! -grito saltanto hacia él.

Mis Ojos En Ti (Kaneki Y Tú) Tomo 1.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora