Capítulo 21

219 22 0
                                    

Los días habían pasado rápidamente, ya nos encontramos en jueves, las clases habían ido cómo tocaban en ese día, me había sentado especialmente con las chicas porque hubo una extraña actividad que organizó la escuela, de que sólo estaríamos con las personas del grado y además de que los chicos fueron llamados para alguna actividad extracurricular que a nosotras no nos informaron, por lo tanto, estuve con ellas todo el día.

Me dediqué a contarle todo del día de hoy a Joshua, quién se había comenzado a quedar a dormir en casa, por órdenes de Kara; porque teníamos una actividad que hacer en algún sitio del mundo con él, Tom y Kara. Ordené mis cosas para pasar de viaje durante un fin de semana entero, ya que eso fue lo que ella me pidió, después de eso, Tom depósito todas las maletas en el carro y nos dispusimos a irnos hacia el hangar privado qué Kara tenía; en dónde se encontraba su jet privado que Tom manejaría.

Tom dijo que trataría de manejar lo más rápido que voy al pudiesen pero que realmente el viaje tardaría demasiado porque era un lugar muy alejado, por ello vi como nada más llegó Joshua al jet y se quedó sentado en un lugar específico del avión para después quedarse dormido. Por mi parte, me puse hablar un rato con Kara, quién me pregunto acerca de mi día. En toda la semana no había podido hablar con ella ya que ella había estado ocupada en varias preparativos que tenía que hacer antes del viaje y yo había estado ocupada con el tema de la escuela. Nos pusimos a hablar de varias cosas durante varias horas hasta que comenzamos a sentirnos cansadas y ya me fui a acostar en uno de los asientos muy cómodos del jet privado, tomé una manta para después arroparme mientras me acomodaba para dormirme.

Me encontraba en un lugar oscuro, no sabían dónde estaba, hasta que de repente un destello de luz comenzó a hablar una voz extraña, que decía las siguientes palabras en repetidas ocasiones. "La prefiero a ella, tómala, la traeré para ti, todas tienen algún precio". Esas palabras se repetían sin cesar mientras del destello de luz se acercaba cada vez más a mi y comenzaba a molestarme en mis ojos. No comprendía lo que estaba pasando hasta que ese destello susurró: "estoy cada vez más cerca de ti".

Sentí una incomodidad crecer, en mi. De repente, desperté sudada y volteando a ver a todos los lados en interior del jet, que estaba oscuro, posiblemente por que era hora de dormir. Joshua seguía en la misma posición desde hace varias horas y Kara también había logrado quedarse dormida toda mi celular para figurar cuantas horas habían pasado, que habían sido bastantes horas. Tom informó que había logrado reducir el tiempo del viaje bastantes horas por la velocidad en la que estuvo viajando gracias al rápido jet de Kara.

Decidí pararme con cuidado y entré a la cabina de manejo en donde estaban Tom solo mientras escuchaba música de Queen a todo volumen dentro de dicha cabina, en el momento en que ya entré el bajó el volumen ya que la puerta estaba abierta y no quería despertar a los pasajeros. Me senté en el asiento del copiloto y comencé a conversar con él.

— ¿Cómo es que sabes manejar tantos vehículos Tom?—. Pregunté con mera curiosidad aun sabiendo que él trataría de resumir toda su experiencia en unas pocas palabras.

—He aprendido viendo a la gente manejarlos—. Dijo Tom mientras me pedía que cerrase la puerta que separaba la cabina de manejo con los asientos del jet e hice lo que me pidió—. Y con práctica.

Cómo Kara, él también me pregunto acerca de mi día a día durante toda la semana ya que él tampoco no lo había visto por los pendientes qué cara tenía que hacer, me preguntó acerca de mis amigos en la escuela y yo le respondí de que tenía varios amigos qué había logrado conocer en la gala de la escuela que se celebró antes de que yo entrara a la escuela.

Después de un rato simplemente nos quedamos escuchando las canciones de Queen mientras nos poníamos cantar a todo volumen las canciones y yo simplemente me reía porque es era un lado de Tom que nunca hubiese pensado. Él era tímido a la hora de hablar o sólo hablar con pocas palabras, pero a la hora de cantar, era totalmente lo contrario. Y disfrutamos ese momento hasta que él me dijo que ya me tenía que alistar por que ya bajaríamos en los próximos minutos y si podía despertar a los chicos que estaban dormidos.

NegociosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora