De vuelta a la Realidad

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Tres días después....

Javier:  ¿Amor?...¿Donde estas?... ¿Amor?.- No obtiene alguna respuesta.

Javier: Eduardo por favor ya sal que tenemos que irnos.-Suspira y se sienta en la esquina de la cama.- Si no sales ahora mismo del baño te cortare el pelo.- Soltó una carcajada y al fin responde.

Eduardo: Eso no es justo.- Dice saliendo del baño con la toalla amarrada a la cintura lo que provoca un sonrojo a Javier.-¿Que?- Pregunta.

Javier: ¿Dos hora arreglándote solo para volver a Caracas?.-Lo mira con el ceño funcido y se cruza de brazos.

Eduardo: ¿Que?, ¿a caso no me puedo arreglar?.-Lo mira con asombro.- Es normal que me quiera arreglar, ademas tengo que darle buena impresión a mi suegrito.- Le guiña un ojo a lo que ambos ríen.

Javier: Pensé que era porque querías hablar con alguien.- Responde y se cruza de brazos.- ¿Estas seguro que solo es por tu suegro?- Vuelve a preguntar.

Eduardo: A ver amor.- Dice tomándolo por la cintura.- Si me tardo en arreglarme en dos horas no es para otra persona mas que para ti.- metiendo su cara en su cuello- Sabes que me traes babeando por ti y no tengo ojos para nadie mas.- Dice rozando su nariz con su cuello.

JAvier: Basta... me haces cosquillas.- Rie volteándose para estar enfrente de el.- No quiero saber que estas arreglándote para otras personas por que sino si te corto el pelo.- Sonríe de manera maliciosa.

Eduardo: No creo que lleguemos a ese extremo.- Sonríe y se separa del abrazo para continuar arreglándose.

Luego de dos horas mas ya estaban listo para irse.

El camino era silencioso, ambos sabían lo que iba a ocurrir al llegar a Caracas, tendrían que enfrentar sus realidades, ya era de hora de afrontar todo y poner un alto a Rubí.

Javier.

No sabía que es lo que iba a hacer en cuanto pisara Caracas, no se si ir directo a la casa de los Larios hablar de una buena vez con rubí y ya, o irme a mi casa y esperar a que pase mas días. Realmente no quiero que mi conversación con Rubí termine en gritos y mas gritos.

Quisiera estar en ese momento con Eduardo pero por obvias razones no puedo hacerlo. MAldita sea en que momento me metí en este peo. Quiero estar bien con Eduardo quiero que ambos seamos felices y lo voy a conseguir no importa lo que tenga que hacer porque Edu es mi felicidad, el corazón me lo dice y yo siempre le hago caso a lo que mi corazón dicta.

Decidimos cada uno ir por su lado para no levantar sospechas, obviamente si nos ven llegar juntos sabrían que Eduardo y yo estábamos juntos todo el tiempo. Ademas el tiene que llegar a su casa a recoger sus cosas porque OMG se va a ir a vivir conmigo... Esto es maravilloso ....

Decido mejor esperar un poco afuera de la casa Larios , Eduardo ya había llegado pues dejo el auto estacionado en la acera de enfrente. Pero a quien veo entrar...... No puede ser.... ¿QUE MIERDA HACE EL ESTÚPIDO ESE AQUÍ?.-Bajó rápidamente de mi coche y cuando estaba a punto de alcanzarlo algo llamado razón me da un golpe fuerte que me hace detener... Es en serio Javier? le ibas a partir la cara en la casa de los Larios buscando que todos se enteren.

Mejor me escondo detrás del carro de Eduardo para ver que es lo que el estúpido ese quiere.

Veo que saca su teléfono, será que le escribirá a Eduardo?, ¿Que carajo hace aquí?, que ganas de decirle que Eduardo es mio.

QUERERTE A TI    >>TERMINADA<<Donde viven las historias. Descúbrelo ahora