Pasado.

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Día Siguiente.

Ambos chicos estaban acostados en la cama de Javier, estaban hablando de cosas random, se reian por los chistes malos de Eduardo y de a raticos se daban besitos. Estaban muy felices y lo estaban disfrutando mucho.

Por otro lado se encontraban Rojas y Larios conversando como todas las mañanas. Estos tenían muchos secretos que estarían por salir a la Luz, claro ellos no sabían eso...

-Rojas, ya no se donde buscar a mi hijo.- Dice desesperado.

- ¿Que sucedió con Eduardo?.- Hace como si no supiera donde se encuentra y que habia pasado.

- Ayer se fue de la casa, me enteré porque Victoria llamó echa nada diciendome que Eduardo se había ido.- Responde con la voz entrecortada.

- ¿Y no sabes lo que sucedió?.-Suspira y le clava la mirada en los ojos.

-No, es algo extraño porque pensé que el se senía agusto.- Su mirada se torno triste.

- Algo tuvo que haber pasado Larios.- Dijo dando un sorbo a su taza de chocolate.

- Es que ni siquiera me dijo algo, no explico porque lo hacía, ni una llamada Rojas.- Sus lagrimas comenzaban a salir.

- Tranquilizate, puede que pronto aparezca.- Dijo dándole palmadas su espalda.- Recuerda que son jóvenes y pues tienden a ponerse rebeldes.

- Es que no soportaría perderlo.- Estaba realmente mal Larios.

- Tranquilo, ademas puede que esté en un lugar seguro.- Empezó a mirar a Larios y le dedico una sonrisa.

- ¿Más seguro que en su casa?.- Pregunta a lo que Rojas asiente.

-No lo creo.- Se sinceró.- Rojas quiero que algo quede claro.- Soltó y Rojas desvió su mirada a el.

- Sabes que eramos muy jóvenes y no sabíamos lo que hacíamos.- Suspiro y continuo.- Y que quizás fui un idiota que se dejo llevar por las hormonas...

- Creo que ese tema ya esta mas que claro.- Rojas lo interrumpe.

-No, no está claro.- Tragó grueso.- Se que jamás me perdonaras todo lo que te hice y como te quite a nuestro hijo.

-Larios ya déjalo, no revivamos ese pasado.- Una lagrima ya estaba recorriendo la mejilla de Rojas.

- Es que si fui un gran imbécil.- Soltó y miró a Rojas.- Fuí un gran imbécil que no supo que hacer, que se dejó deslumbrar por la primera que se me pasó por delante y dejé a un lado mi felicidad y ya la familia que tenía.- Ya para ese momento las lagrimas de Rojas estaba saliendo a flote.

- ¿A que se debe este tema ahora?.- Pregunta quitándose los rastros de lagrimas que quedaban en sus mejillas.

- Que aún siento algo por ti y que estoy aguantando mis ganas de darte un beso.-Rojas solo pudo sorprenderse.

- Creo que la ida de Eduardo te ha puesto mal, no sabes lo que dices.- Dice poniéndose de pié para marcharse pero la mano de Larios se lo impidió.

- Sabes que no es así, Rojas yo aun te quiero y se que tu a mi también.- Su mirada tenía un brillo especial.

- Larios ya formamos una vida, una familia, cada uno se casó tuvo hijos y eso forma parte del pasado que no quisiera regresar.- Soltó y se fué, dejando a un Larios echo mierda.

Si entre Rojas y Larios hubo algo, se amaron muchísimo, incluso vivieron juntos y a Larios no le importó que Rojas tuviera un hijo <<Eduardo>>, el lo quiso como si fuera suyo desde el primer momento en lo sostuvo en sus brazos. Luego Rojas empezó a salir adelante y tener mejores ofertas de empleo al igual que Larios ambos estaban saliendo adelante, pero como siempre un/a tercero interviene y todo se va la mierda.

QUERERTE A TI    &gt;&gt;TERMINADA&lt;&lt;Donde viven las historias. Descúbrelo ahora