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-¡Lee Minho!-Ryujin se arroja y comienza a golpear levemente la espalda del mayor-Eres un tonto, un estúpido, un idiota, un..

-Basta, basta-El chico se aleja asustado, refugiándose tras otro chico del que Ryujin desconoce el nombre-¿Ahora que hice?

Ryujin le avienta una hoja de papel, el joven pelinegro la atrapa y lee el contenido.

-Es el número del casillero de Hwang, ¿Qué quieres que haga con ello?-El chico la mira confundido, dándose la vuelta y esperando a que Ryujin lo siga

-El número del casillero de Yeji es el 15, no el 75, queda hasta en diferente piso-Ryujin se cruza de brazos enojada-Te conseguí una reservación en ese restaurante y ni por eso me pudiste pagar bien.

El chico frente a ella comienza a reír a carcajadas.

-Pero si este no es un siete, es un uno-El chico marca con su dedo el número-En todo caso, tú tienes la culpa por haber leído mal este número, ojalá que a la persona que le hayas dado tu carta confesándote no tenga pareja.. o que al menos no sea un chico-Minho ríe nuevamente al ver la cara de desagrado de Ryujin-¿Te imaginas que el chico tenga un crush en ti y tengas que romperle el corazón?

-¡Te odio Minho!

El joven solo sonríe y se va, tomando la mano del otro chico y desapareciendo entre las personas del pasillo.

-Hola, Unnie-Una voz demasiado tierna la hace asustarse, girando sobre sus talones y levantando su mirada para ver el rostro de la chica.

-¿Si?-Pregunta confundida

-Quiero decirte que tus palabras fueron muy lindas-La chica le sonríe, con un sonrojo que mostraba sus mejillas ruborizadas y una tierna mirada-Pero realmente no recuerdo haber tenido una plática de dos segundos con usted antes.

Ryujin parecía entender la situación, tratando de interrumpirla

-Mira, deja te explico..

-Pero acepto su cita-La chica, que obviamente era menor que ella, no podía dejar de sonreír-Usted puede decirme el lugar, la hora y yo pediré permiso ¿Está bien, Unnie?-La chica pregunta

Tal vez era el momento perfecto para que Ryujin le explicara todo, pero la sonrisa tierna en su rostro y su sonrojo hacían que su alma se ablandara, no queriendo lastimarla ni romper su corazón, tal vez le explicaría después.

-Si, yo te hablo-Ryujin sonríe a medias.

-Adiós-La joven sale del pasillo agitando su mano en forma de despedida.

Love letter || 2Shin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora