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Todo era confuso y mi vista daba vueltas sin parar. 

Lo único que distinguía era colores y formas borrosas. Pero algo sacó la expresión de horror de mi rostro. Un cuerpo dejar de convulsionar y empezar a intentar levantarse, era como que 15 toneladas salgan de mi cuerpo, aunque ni supiera que estaban ahí. 

Después de eso todo es negro sobre negro y cuando por fin  abrí los ojos estaba acostada en mi cama. Dos pares de ojos, unos marrones intensos casi consumidos por colores que los oscurecieron; y otros marrones con cierta claridad, era como una guerra donde uno le robaba al otro. Los juanes estaban perplejos al ver que sólo los miraba sin pronunciar palabra. 

Mi mirada iba de un lado hacia el otro como si estuvieran discutiendo, pero sus labios no se movían, sólo sus ojos se movían al compás que cambiaba la vista de cara. Seguimos así hasta que un cuerpo entró a la habitación, su cara estaba completamente llena de alegría pero también reflejaba dolor. 

Maxi estaba parado, mirándonos, hasta que reacción y pronunció las palabras exactas para que lo que más estaba con teniendo salga.

 La libertad sólo se consigue al renacer, gracias.

 Una lágrima rodó enseguida por mi cachete y luego otra y otra, hasta que simplemente ya no puede contarlas. Su miraba iluminada de lástima se acercó, me dio un beso y ahí se concretó el adiós, la despedida para siempre. Ya estaba decidido, el plan trazado meticulosamente en mi mente se llevaría a cabo y nadie lo sabría, ni siquiera Luna. 

Subí a mi habitación y busque el gran libro de hechizos, la sección ya estaba marcada y el hechizo a medio copiar. Termine de copiarlo y salí sin que nadie me viera a buscar las cosas necesaria para pactar. 

En eso  que voy caminando la vi, era Bianca, viviendo como si fuera normal y juro que esperé mucho para esto, pronuncie el otro hechizo escrito en la hoja que tenía en mi mano y veo como su magia (una gran nube de color rosa) y  todo su poder era extraído de su cuerpo e incorporado al mío sin que ella pudiera hacer nada más que quedarse paralizada. Siempre pensé que sería mucho más difícil, pero no fue tan fácil como pronunciar palabras en un idioma distinto y listo. Por suerte ella no decidió luchar o simplemente no lo noto.

Lamentablemente tuve que atacarla  por la espalda, pero qué podía esperar, ella era mi peor enemiga y yo jamás le hice nada. 

Saque estos pensamientos de cabeza y seguí en busca de los distintos materiales, pero una voz en mi cabeza me detuvo.

 No puedes hacerlo, te lo prohibo—dijo sin lugar a dudas, ni siquiera a un tal vez, simplemente la ignore y seguí mi camino.

 Al tener todo, hasta un gran dolor de cabeza por las reiteradas quejas de Luna, volví a casa, casi lista para que, de una vez por todas, poder  terminar con esto. Como tal lo dice el mito las Lunas lo empezaron y las Luna que quede lo terminará, pues la muerte de una logrará resolver sus diferencias y esta sola podrá gobernar la Luna a su antojo. 

Lista para mañana terminar la maldición impuesta por las diferencias de las hermanas Luna, decido dormir pues voy a necesitar mucha concentración y con este dolor de cabeza no podría. Miles de sueños me inundaron esa noche, pues después de todo sería la última, caras y caras se amontonaban a ver mi sacrificio y todos o al menos las que veía lloraban mi destino, pero sólo una se mantenía jovial. Juan era el único que me miraba con ojos ciegos por amor y con esa sonrisa como diciéndome tranquila todo estará bien. 

La sonrisa del futuro, es una burla al pasado. 

Al despertar subí al techo de la casa de Juan, ahí empezaba mi plan. El conjuro de encierro era uno normal para mi, ya había hecho uno para cuando Fabio y Juan se pelearon, así que este sería pan comido. 

No lo hagas — rogó Luna con su último esfuerzo antes de que termine el hechizo. 

Lo siento — dije triste — pero debo terminar de una vez por todas con esto. 

Terminado el hechizo, se venía lo que en verdad daba miedo, los conjuros eran difíciles y yo ... bueno yo no era una experta. Las velas estaban justo cada una en cada esquina, su color negro llamaba a la luz y cuando esta se acercaba era absorbida como si fuese el oxígeno que mantenía el fuego ardiendo. 










Si si, no actualizo hace años y si esta es la parte donde digo que lo haré más seguido, pero adivinen que... No lo voy a hacer jajajjaja espero les guste, perdón por tardar y escribir tan mal jajjajaja


Los quiere Juan ♥️

El lado oscuro de la Luna Donde viven las historias. Descúbrelo ahora