Juego de gemelos

Malas noticias

Luke observaba como Anakin parecía nervioso, como si tuviera que decirle algo muy importante, pero se contenía. Luke esperaba no se lo dijera, no se sentía preparado para escuchar que su padre tenía novia.

- Luke hoy va a venir una amiga a esta casa- dijo Anakin y Luke sonrió- Quiero pasar la mayor parte de mi tiempo contigo, pero si tu no deseas que haya nadie más aquí, puedo decirle que venga otro día- dijo Anakin sentándose frente a su hijo.

- Claro que no papá- dijo Luke con una sonrisa- Quiero conocerte mejor, y si quieres presentarme a tu amiga, no tengo ningún problema- dijo Luke y Ahsoka que pasaba por allí, supo que eso era algo alarmante ¿Que malvado plan tenía Luke en mente? ¿Y que tanto se divertiría ella a costa de ese plan?

Anakin sonrió y preparó el desayuno de Luke, y el de Ahsoka, que parecía tentada a reír por todo ese día en particular.

Anakin sonrió al ver a Ahsoka tan feliz, ella no había sonreído tanto hace mucho, especialmente desde que dejó a Rex en Coruscant.

Tal como Anakin había prometido, ese día Ayla Secura entro a su casa, saludando a Luke con cariño, Anakin le había explicado rápidamente la situación, y ella había comprendido inmediatamente, o eso era lo que le hizo pensar a él, porque la situación le molestaba, era el momento menos conveniente para que el pasado de Anakin lo persiguiera, y el que conociera a Luke arrastraba a Padme Amidala de vuelta a su vida, justo cuando estaba por lograr lo que quería. Aún así debía fingir, Anakin amaba a sus hijos por sobre todas las cosas, pero pronto eso no sería más así. Pronto solo ella ocuparía su corazón. Vio a Ahsoka mirarla con una sonrisa tan fingida como la suya, pronto ni siquiera esa chica estaría en la vida de Anakin, porque Ayla Secura sabía que esa chiquilla desconfiaba de ella, y ella no arruinaría sus planes.

- ¿Qué te gusta hacer Luke?- preguntó Ayla observando a Luke que jugaba con una de las naves coleccionables de Anakin.

- Correr un pod y pilotear ¿Quieres ver? Estoy seguro de que papá me prestará su nave- dijo Luke sonriendo tomando la mano de Ayla Secura y ella incómoda acepto, debía fingir bien.

- Ahsoka ¿papá esta en el taller?- preguntó Luke tirando de Ayla y Ahsoka lo miro confundida.

- Si, dijo que volvía de inmediato- dijo Ahsoka- ¿Para que lo buscas tan apurado?- preguntó Ahsoka, ¿Ayla se llevaba bien con Luke? 

- Quiero que me preste su nave para poder llevar a Ayla a dar una vuelta- dijo Luke inocentemente, y Ahsoka sonrió internamente.

- Oh, no pierdan tiempo- dijo Ahsoka arrojándole un par de llaves a Luke- Toma la mía- dijo guiñándole un ojo y el niño sonrió, al menos Ahsoka si lo apoyaba.

- ¿Tú conducirás?- preguntó Ayla y Luke asintió, no contradeciría al mocoso.

Cuando regresaron, Ayla Secura pudo jurar que nunca ni siquiera en sus años como jedi, había sentido tanto miedo. Anakin la observaba preocupado, mientras Luke corría y saltaba en los brazos de su padre. 

- ¿Q-que estaban haciendo?- preguntó Anakin nervioso, al ver que Ayla parecía incluso un poco pálida, y su piel incluso estaba tomando una tonalidad grisácea. 

- Luke pilotea muy bien- dijo Ayla rozando la mano de Anakin con su mano y él sonrió- Será un gran piloto, como tú- sonrió Ayla y Luke observó como su padre tocaba suavamente la mano de Ayla con su mano libre, rodó los ojos de forma casi imperceptible.

Pasaron largas horas con Ayla, y Luke se enteró con indignación, que Anakin había propuesto reunirse con Padme en Naboo, porque tenía que estar allí con Ayla Secura, porque debían hablar de unos negocios con unos arquitectos de Naboo. Era por eso que Anakin había sugerido Naboo, no porque tuviera hermosos recuerdos allí, sino porque debía estar allí con Ayla Secura.

Cuando Ayla se fue, Anakin quedó a solas con Luke.

- Luke, yo bueno, no quería que te enteraras así de  que ella iría con nosotros a Naboo- dijo Anakin con dificultad- Bueno, yo

- ¿Es tu novia?- preguntó Luke seriamente

- Nos vamos a casar en unos meses Luke- dijo Anakin suspirando y Luke corrió fuera de casa, tocó la puerta de Satine y cuando ella abrió entro allí abrazando al pequeño niño. 

- ¿Qué ocurre Luke?- preguntó Satine observando como Anakin corría tras Luke.

- Papá se va a casar- dijo Luke llorando y Satine comprendió, le hizo una seña a Anakin de que ella se encargaría de explicarle al pequeño lo que ocurría. Anakin pensaba que Leia lo tomaría mal, era de suponer que Luke también lo tomara mal, no quería discutir con él, ahora que recién lo conocía. Pero no quería tener secretos con él, así como tampoco los tenía con Leia.

Luke se quedo dormido en casa de Satine, y Anakin fue por él muy tarde en la noche, mientras recordaba las palabras de Ahsoka ''¿Estás seguro que es lo que quieres hacer?, tú pasado ha tocado literalmente tu puerta ¿No será señal de que no debes hacerlo?''. Anakin observaba a su hijo dormir, ¿Qué debía hacer? Había encontrado una oportunidad con una vieja amiga, una oportunidad de empezar nuevamente, ¿Por qué justo ahora Padme volvía a su mente como un fantasma que nunca sería capaz de olvidar? ¿Por qué le recordaba su error? ¿Por qué se arrepentía tanto de no haber regresado por ella? 

En Coruscant, Leia pensaba e lo que ocurría, no quería que su plan se arruinara, Luke la había llamado para contarle lo que ocurría, y ella tenía un plan, bien, si Ayla Secura estaría presente en el reencuentro de sus padres, ellos siempre podrían hacer algo para que sus padres se juntaran nuevamente. No dejarían que sus planes se escaparan de las manos, y Leia definitivamente no quería una madrastra, no, ella quería una familia, su familia, y lo lograría. A pesar de las dificultades.

- Mami ¿Me cuentas nuevamente la historia de como conociste a papá?- preguntó Leia y Padme suspiró ¿Por qué Leia insistía en recordarle a su ex esposo? ¿Por qué Anakin volvía como un fantasma que nunca sería capaz de olvidar? Padme incluso sentía ganas de llorar, pero él no había vuelto por ella, él se había ido, él había roto su promesa, y ella tampoco había ido por él, ambos habían fallado, y ahora no había solución para eso.

La siguiente semana pasó rápidamente, Anakin no volvió a llevar a Ayla Secura a casa, por lo que él y Luke disfrutaron de la semana por completo. Recorriendo incluso otros planetas cercanos.

Leia incluso acompañó a Padme a una importante sesión del senado, maravillándose de lo valiente y poderosa que era su madre, y de la capacidad de convencer a cientos de senadores, su madre era genial.

Cuando faltaba solo un día para volver, los gemelos debían repasar los detalles de su plan. Plan del que Obi- Wan y Ahsoka serían parte activa. Leia había intentado pedirle ayuda a ese hombre que llamaban Rex y que sabía que tenía algo que ver en su pasado con Ahsoka, pero no había podido conocerlo en persona, pero cuando lo conociera, también le pediría ayuda, y Luke debía convencer a Satine de ayudarlos, aunque ella no parecía tentada a saber nada de Coruscant, y al parecer mucho menos de Obi- Wan.