Capítulo 54

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Antes de irme me paro enfrente de un espejo que hay en la habitación. Sé que soy yo, porque claramente me estoy viendo pero me siento diferente me siento ajena a mí, siento como si caminara en una nube. Quizás serán los nervios que me ponen un poco paranoica pero quien no se pone un poco paranoico el día de su boda.

- Ten, te falta estó- Lexy me da el bouquet. Me repaso enfrente de el espejo por un minisegundo. El velo, el vestido, el maquillaje, y el bouquet hacen la combinación perfecta.- Te ves hermosa- Añade colocando una mano sobre mi hombro. Me giro y le agradezco con la mirada.

- Es hora- Ordenó mi padre.

Tras dar una breve caminata desde el pasillo de la habitación hasta la entrada de los olivos donde seria la ceremonia. Nos detenemos. Puedo escuchar “A Thousand Years de Christina Perri Sonando de fondo. Todas las damas de honor empiezan a caminar hacia el altar, Lexy es la ultima que sale pero antes de irse me susurra “Todo saldrá bien” inaudible y se va.

Tengo demasiadas emociones revoloteando en mi interior. Me tenso y me aferro al brazo de mi padre cuando escucho que cambian sutilmente la música y empieza la típica canción de boda que avisa mi entrada. 

- Papá no me dejes caer- Suplico.

- Nunca- Afirma.

- ¿Vamos?- Pregunta

- Vamos- Asiento.

Empieza nuestra caminata hacia el altar al aire libre. Mientras caminaba repasaba mentalmente como debía caminar para no torcerme el pie en estos tacones que cargo puestos, no vaya a ser que haga una mala jugada y me tuerza el tobillo de camino al altar. Mujer precavida vale por dos.

Acaba nuestra caminata cuando estoy enfrente de Kevin, mi padre me suelta y me entrega a Kevin. La mirada de Kevin transmitía euforia, sentimiento, nostalgia, amor….creo que hasta me podría atrever a decir que puedo escuchar su corazón latir a mil por hora al igual que el mío.

- Queridos hermanos y amigos,estamos aquí reunidos el día de hoy para unir a esta pareja en sagrado matrimonio.- Anuncia el sacerdote.

Después de unos palabras más por parte del sacerdote nos invita a tomarnos de las manos a Kevin y a mi.

Sacerdote: Kevin Köhler Miller, ¿elige usted a Eva García Sousa como esposa para serle fiel en las alegrías y en las penas, en la riqueza y en la pobreza, en la salud y en la enfermedad, hasta que la muerte los separe?- Pregunta a Kevin.

- Si, acepto.

Sacerdote: Eva García Sousa, ¿elige usted a Kevin Köhler Miller como esposo para serle fiel en las alegrías y en las penas, en la riqueza y en la pobreza, en la salud y en la enfermedad, hasta que la muerte los separe?- Me pregunta. Sonrío.

- Si, acepto.

- Las alianzas por favor- Ordena. Adam se acerca y le entrega la alianza a Kevin. Kevin toma mi mano y posiciona la alianza en la entrada de mi dedo anular.

- Recibe esta alianza en señal de mi amor y fidelidad a ti- Pronuncia Kevin mientras desliza el anillo en mi dedo. Se me está nublando la vista por las lágrimas que amenazan con salir.

No llores, no llores. Se te correrá el maquillaje.- Me repito mentalmente. Adam me entrega mi alianza.

- Recibe esta alianza en señal de mi amor- Se me quiebra la voz, carraspeó y continuó- Y fidelidad a ti- Termino de hablar como puedo mientras deslizo el anillo en su dedo. Suspiro aliviada cuando termino.

- Perfecto. Lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre, pueden besarse.

Kevin me quita el velo con mucha delicadeza y funde sus labios con los míos en un tierno beso.

Almas GemelasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora