Kevin Köhler
Ha pasado al rededor de una semana y no he sabido nada de Eva, en todo este tiempo. No contesta mis llamadas, ni mis mensajes y cuando voy a su casa nunca está.
Creo que esta evitándome. ¿Se habrá enterado de algo de mi pasado?
Si lo hizo, no la culpo por querer alejarse de mi. Además, ya me extrañaba a mi que era muy bonito para ser verdad.
La verdad, es que me gusta mucho esta chica, creo que se podría hasta llegar a decir que me he enamorado de ella. Por eso creo que lo mejor es lo que está pasando.
Estoy tan centrando en mis pensamientos que no escucho mi móvil sonar. Hasta que me percató y lo cojo.
- Si?
- ¿Vendrás a la fiesta hoy?- me pregunta Christian desde el otro lado de la línea. Es un chico que siempre me compra LSD.
- Si, allí estaré.
- Traerá mis dulces ¿no?- Dice con tono de entusiasmo.
- Claro, y tú traerás más clientela ¿no?.
- Hombre, pues claro. Como si no me conocieras ya.
- Vale, pues allí nos vemos.-Cuelgo y empiezo a alistar todas las drogas para la fiesta.
Las drogas que más uso para trabajar y las más pedidas por la personas son: LSD, marihuana, cocaína y éxtasis. Acomodo todos los dulces en una mochila especial que tengo para tener todo bien organizado. Tengo todo listo para la pelea de esta noche y para la fiesta.
Cojo el móvil y busco el número de David, que es mi personal trainer, además es como mi hermano, nos criamos juntos.
- Hey, David. ¿Qué tal?
- Hey cabroncete, ¿Qué pasa?
- Bro, necesito que vengas para mi casa a ayudarme a entrenar un poco, tengo pelea hoy y ya sabes que me gusta ganar.
- Claro, y también sé que si no me tuviera para entrenarte estarías perdido. Pero recuerda nada de meterte ninguna de esas mierdas que vendes- Advierte David.
- Ya sabes que no me gustan. Ademas, seria un perdida para el negocio.
- Vale, déjame terminar con un chico aquí y voy para allá. Nos vemos ahora.-Nos despedimos y cuelga.
***********
Estoy por acabar con este chico, le proporcionó un par de golpes y llaves y el chico cae al suelo como un pluma y no se levantó más, hasta que lo vinieron a levantar del suelo.
Bajo de la jaula y me dispongo a ir al baño para ducharme y alistarme para ir a la fiesta. Tengo algunos golpes notables y el labio roto pero nada que no se pueda quitar en unos días.
Después de unos cuantos minutos conduciendo llegó al lugar de la fiesta y desde acá afuera se escucha la música. Entro a la casa y enseguida me invade el ritmo movido del reggaeton que claramente no puede faltar en una fiesta.
Divisó desde lejos a Christian, que me hace una seña con su mano en señal de saludo. Se acerca a mi.
-Tengo el lugar reservado para que empieces a repartir los dulces.-Grita en mi oído por el ruido de la música. Christian me hace una señal con la cabeza para que le siga y le sigo.
Subimos unas escaleras y entramos en un cuarto. habían unas 15 personas en el, que cuando me vieron, fue como si hubiesen visto a un Ángel.
-Ya llegaron los ricos dulces-Les dice Christian a todos los presentes en el cuarto. Todos empezaron a sonreír y hablar entre sí.
Me hago un hueco entre las personas y llegó a la cama, me quito la mochila y la coloca en la cama. La abro y dejo a la vista todo lo que traje.
-Dinero en mano y saliendo una vez entregado el producto.-Ordenó- Todos asienten y siguen la orden que les di.
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Almas Gemelas
RomanceLo común está sobrevalorado. Una chica nada común,un chico con muchos demonios internos. Un amor fuera de lo convencional. El amor será suficiente motivo para luchar y desprenderse de sus demonios. ¿Valdrá la pena luchar por amor?