❝ Tell Me ❞ | Chaesoo & Jenlisa

◦09◦

Si, lamentablemente, su "salida" con Jisoo había terminado después de aquella llamada. Aquella maldita llamada. Tenia que admitir que se la había pasado genial con Jisoo, todo había sido increíble, a excepción de ese detalle que termino tirando todo por la borda.

Si aquella persona no hubiese llamado ¿Qué hubiese pasado? ¿Qué significo aquella mirada en esos ojos marrón que de repente se tiñeron de esperanza?

No tenia ni idea.

Flashback, Horas atrás.

- Ah, Hola, Amor. - Fue lo primero que dijo Jisoo al responder la llamada.

¿Amor?..

Una mezcla de celos y dolor se habían apoderado de Rosé al escuchar el apodo, ¿amor? lo mas seguro es que tenia que ser la chica con la que había visto a Jisoo de la mano.

- Oh, entiendo. - Dijo Jisoo al teléfono. - ¿Justo ahora? ¿Dónde te encuentras? -. Jisoo le dedico una mirada fugaz antes de girar y alejarse unos pasos de ella.

Rosé trató de disimular la mueca que se apodero de su rostro y simplemente se quedo parada sobre su lugar. No quería oír lo que Jisoo decía, pero al parecer no tenia la voluntad suficiente y su mente terminaba traicionándola. Oyó a Jisoo responder varias palabras cortantes con el mismo tono, «No, no tengo ningún problema» respondió en medio de un suspiro, «No precisamente» después de eso Rosé no logro escuchar mas.

Jisoo regreso hacia ella, su rostro reflejaba pena e incluso lastima. Rosé no tenia que escuchar ninguna palabra de su boca, era obvio que había surgido algo mas importante que ella.

- Bueno Rosé, lo siento. Surgió algo. ¿Te importaría si dejamos esto para otro día? 

-Oh... no te preocupes, esta bien puedes ir yo estaré bien  -mintió, ni ella sabia por que lo hacia, los celos tenían el control de sus palabras en este momento-

- No, ¿en serio crees que te dejare aquí? - Jisoo la miró incrédula. - Vamos, te llevare a tu hogar. 

- No, en serio estaré bien. Puedo caminar, no esta tan lejos. - Trató de convencerla pero Jisoo parecía aferrada a la idea llevarla de vuelta. Desde ese momento supo que Jisoo era de esas chicas que se preocupaba mucho por los demás y por no quedar mal.

- No es necesario que camines, te llevaré. - La tomó de la muñeca y comenzó a caminar con ella. 

Rosé sintió ese escalofrió que ya había sentido anteriormente y el como su piel revivía antes ese toque tan cálido que prefirió no rezongar mas, ¿a quien quería engañar? No pensaba caminar hasta casa, pero su mente en estos momentos la estaba traicionando como nunca antes lo habia hecho.

- No quiero ser grosera contigo Rosé, por eso insisto en llevarte. - Aclaró Jisoo a pesar de no ser para nada necesario, ya tenían el auto a solo unos metros. 

Ella le abrió la puerta tal cual como cuando fue a recogerla y  hasta que la vio acomodada cerró la puerta y rodeó el auto. El camino fue aun mas silencioso, pero para nada incomodo. Jisoo parecía muy perdida en su cabeza y sus expresiones cambiaban constantemente. Algo la tenia distraída notablemente. A Rosé una vez mas le dio curiosidad el saber mas de aquello, era obvio que tenia problemas, pero algo la hacia querer ayudarla, escucharla y tenerla entre sus brazos una vez mas.

Pero por ahora lo mas que podía hacer era guardar silencio y no entrometerse en sus asuntos.

En cuanto Jisoo paró frente a su hogar, Rosé tomó la manija pero no abrió la puerta.