𝐂𝐀𝐋𝐘𝐏𝐒𝐎 | Las leyendas son ciertas, los monstruos existen, los mitos se vuelven realidad, los secretos destruyen el alma y la pasión incendian el corazón.
☄️JaehyunxRosé
FINALIZADA
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Todo estaba negro, no había nadie a su alrededor, podía escuchar el sonido del mar, podía oler la sal, podía sentir la brisa de este pero no podía verlo. Exhaló frustrada sintiendo como sus pulmones ardían mientras respiraba, todo comenzó a darle vueltas, trató de hablar pero no podía hacerlo, las lagrima salieron de sus ojos por si solas. Confundida, tocó su rostro sintiendo como estas caían por su rostro, no se sentía triste ¿por qué estaba llorando?
Un ruido, un golpe muy duro se escuchó a lo lejos y todo apareció, el mar la rodeaba como grandes muros, ella estaba en medio del imponente azul. Roseanne trató de hablar, de gritar el nombre de su madre, el de Jaehyun, pero de su boca no salía voz.
La brisa la golpeó con tanta fuerza que la hizo caer, todo comenzó a cerrarse a su alrededor y entre el pánico y frustración, Roseanne divisó a lo lejos un hombre, alto, tez morena, con una sonrisa enternecida en sus labios y lágrimas de felicidad desbordando sus ojos.
La abrazó.
Podía sentir la calidez de sus brazos rodeando su cuerpo pero Roseanne no se movió, no se atrevió hacerlo.
"Si quieres crecer tienes que dejar de temer a lo que por derecho te pertenece. Baja a la isla y lo encontraras lo que necesitas" Susurró a su oído, lo enronquecida de su voz la estremeció. Trató de ver más allá de su hombro y lo único que sus ojos vieron fue a una mujer.
Una mujer apareció tras él, la belleza que ella poseía era algo que solo ella podía soñar. Su cabello rojo se movía por la brisa, esta le sonrió con malicia y negó con su cabeza.
"Si quieres crecer tienes que dejar de temer. Confía en tu padre Rose"
La voz del hombre sonó en su cabeza haciendo detener a la mujer. Ella le volvió a sonreírse arrodillo a la altura de Roseanne hasta tomar su rostro con una expresión de asco, su mano presionó su mandíbula hasta su mentón y negó con su cabeza.
Roseanne se alejó y está le sonrió con malicia y los muros que contenían al gran azul comenzaron a desplomarse, uno a uno consumiendo todo a su paso. La castaña corrió antes de que el mar la aplastara, el miedo comenzó a consumirla poco a poco mientras el agua se acercaba a ella haciendo destrozos a su paso.
Fue entonces cuando despertó.
Con el corazón golpeándole el pecho, aún con la sensación de miedo y el escalofrío recorriéndole la espalda. Tocó su rostro sintiendo las lágrimas resbalar por este y los dedos de la mujer presionar su mentón.
—Hace cuánto tienes esos sueños — La voz de su madre la sobresaltó.
Roseanne giró su rostro y notó a su madre sentada al pie de la cama y junto a ella con los brazos cruzados y el semblante serio, se encontraba el capitán. Ambos la miraban atentos y preocupados
