Me volveras loca.

Capitulo 9.

Cuando llegamos a casa eran las diez de la mañana, estábamos empapados, y no habíamos vuelto a hablar desde aquella conversación tan importante que habíamos tenido en la colina. Un lugar increíble y al mismo tiempo triste. No sabía cómo actuar, pero lo que sabía es que si quería respuestas se suponía que las tendría aunque no estaba tan segura de ello como lo había estado en aquella colina, en aquel momento.

X: ¿Habéis llegado? -dice apareciendo.

Miré hacia dónde provenía la voz y me encontré a mi madre con una sonrisa en la cara y mirándonos con ternura a ambos. Me ponía nerviosa que me mirara así, al menos en este momento me sacaba de quicio. Realmente me sacaba de quicio.

Luke: Si, aquí estamos.

Mami: Estáis empapados.

Luke: Llovió bastante.

Mami: Ya lo veo. -nos mira seria- ¿No podíais estar en un lugar cerrado?

Luke: Es que nos escapamos a un lugar cualquiera y comenzó a llover, y bueno... -dice señalándonos.

Mami: Sois increíbles. -dice riendo- Id a cambiaros anda.

Salí de allí sonriéndole seguida por Luke y me quedé parada en medio del pasillo al ver a Samantha allí, con unos pantalones que más que pantalones parecían bragas, y un top corto, con el pelo suelto hasta la cintura y unos calcetines. Me miró sonriendo y pasó de largo acercándose a Luke y pasando un brazo alrededor de su cuello. Luke no se apartó, no hizo absolutamente nada de nada. Se fue caminando con ella hacia su habitación y eso fue lo que más me dolió de todo, verlo marchar sabiendo que me quería y que yo incluso, lo quería el doble.

Entré en mi habitación y me fui al baño tirando la ropa a medida que me adentraba en el mismo. Me metí en la bañera en silencio, mientras pensaba en todas esas palabras que me había dicho Luke y que por lo que veía eran huecas. Completamente huecas. No tenían ningún sentimiento para él. Me hundí en el agua y me quedé así, en silencio hasta que decidí que era mejor quedarme dormida en la cama, o en cualquier otro sitio que en la bañera, no me apetecía ahogarme. Me levante de la bañera, me seque un poco y salí desnuda a mi cuarto, cerrando la puerta del baño. Cogí algo cómodo y me fui hacia mi cama dejando todo lo que me había quitado tirado en el suelo, no tenía ganas de nada y menos de colocar cosas. Después de cuatro de horas sola, suponía que eran cuatro horas, ya que era muy tarde ya, sin nadie que viniera a hablar conmigo, cosa que realmente me extrañaba ya que siempre estaban encima de mí, desde que llegaba hasta que me marchaba, decidí salir de mi habitación y hacer algo de comer, o escribir algo, o cantar algo, mejor cantar algo, no me apetecía leer en estos momentos, cosa extraña en mí. Cogí la guitarra y me fui al jardín trasero, que estaba vacío. La casa estaba en completo silencio, seguramente se había marchado todo el mundo, o habían ido de fiesta y seguían durmiendo, cosa que me extrañaba un poco. Suspire y me quede quieta en el sitio pensando en que cantar, y una canción vino a mi mente al momento. Una canción de los chicos, una canción preciosamente triste que me había aprendido de memoria el mismo día que la había escuchado.

'I drove by all the places we used to hang out getting wasted, I thought about our last kiss, how it felt the way you tasted and even though your friends tell me you're doing fine. And you're somewhere feeling lonely even though he's right beside you, when he says those words that hurt you, do you read the ones I wrote you?!

Sometimes I start to wonder was it just a lie? If what we had was real, how could you be fine? 'Cause I'm not fine at all.

I remember the day you told me you were leaving, I remember the makeup running down your face and the dreams you left behind, you didn't need them like every single wish we ever made. I wish that I could wake up with amnesia, and forget about the stupid little things, like the way it felt to fall asleep next to you and the memories I never can escape, 'cause I'm not fine at all.