Un poco de tranquilidad

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Ma: (asintió).

Vic: (estaba preocupada por lo que Avelina le había dicho, solo esperaba que María no se enojara, pero sobretodo que entendiera que aunque tuvieran un bebé a ella también la iban a amar).

Cuándo llegaron al río, María tuvo muchas ganas de meterse a nadar en él.

Ma: ¿me puedo bañar? (Les preguntó).

Vic: es muy peligroso, ¿por que no nos sentamos a escuchar el sonido del agua?

Ma: eso es muy aburrido, yo quiero nadar.

H: no le pasará nada, Victoria, déjala que nade un rato.

Vic: ¿y si se ahoga qué?....

Ma: no me voy a ahogar, se nadar muy bien.

Vic: esta bien, ve, pero no te adentres mucho.

Ma: si, mamá (se quedó en ropa interior y se metió a nadar).

H: ¿que te dijo Avelina? (Se sentó a su lado, ninguno perdía de vista a María).

Vic: que quiere jubilarse, no se Heriberto, ella nunca hubiera querido eso y ahora de repente dice que quiere descansar, que ya aguanta como antes.....temo que me esté ocultando cosas, yo no podría vivir si a mi nana le pasara algo, estoy preocupada.

H:.....puede que solo necesite eso, descansar, tienes que entender que Avelina ya tiene una edad.

Vic: eso lo sé, pero ella siempre ha sido tan activa que me deja descolocada su petición de jubilarse.

H: no te imagines cosas que no hay, si a Avelina le ocurriera algo malo, ella te lo diría.

Vic: supongo que si.....también hay otra cosa que me dijo que me preocupa.

H: ¿que otra cosa?....(vió a la niña acercarce mucho a la cascada) MARÍA NO TE ACERQUES A ESA ZONA, NADA MÁS PARA ACÁ (le gritó para que le oyera).

Vic: me preguntó si ya le habíamos dicho a María lo de mi embarazo, todavía no le hemos contado nada, dice que puede sentir celos, por que ella esperaba que tu y yo le dieramos todo nuestro amor y ahora lo va a tener que compartir.

H: María es muy madura para la edad que tiene, lo va a entender perfectamente.

Vic: no la quiero ver triste ni desilusionada.

H: al revés, creo que estará muy contenta por que tendrá un hermanito con él que jugar.

Vic: ¿de lo decimos?.....

H: (asintió) MARÍA, VEN UN MOMENTO (la llamó).

La niña nadó hasta salir y sentarse junto a ellos.

Ma: ¿que pasa?, me alejé de la cascada.

H: no es eso, tu mamá y yo queremos hablar contigo de algo importante.

Ma: ¿de qué? (sin entender).

Vic: tu sabes que Heriberto y yo estamos casados y que nos amamos, ¿verdad?.

Ma: si, claro que lo se.

Vic: pués en todo este tiempo que llevamos juntos han pasado cosas, muchas muy bellas, como haberte conocido, por ejemplo....

La MalqueridaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora