La Malquerida

❤ Para morir iguales ❤

H:...¿y ya tomaste la decisión? (Temeroso).

Vic: (asintió) si, ya tomé la decisión, mi madre me ayudó, no me dijo nada nuevo, yo sabía cuál iba a ser su reacción cuándo le contara todo, estuvo encontra del aborto en cuánto se lo nombre se enojó, me regaño por mis malos actos y dijo que esto teniamos que pagarlo nosotros no los bebés y en realidad tiene razón (suspiró) los voy a tener...

H: ¿de verdad? (Sonrió) mi vida  que buena noticia (la abrazó) gracias, gracias, mi amor.

Vic: (rió) no te emociones tanto por que después de dar a luz pondré remedio, hablaré con el doctor para consertar una cita y que me ponga un diú, creo que debemos descansar un tiempo y disfrutar de los niños...de todos por que con María, Estrella y estos dos ya vamos a ser familia numerosa.

H: los hijos dan alegría y unidad, amor, pero estoy de acuerdo contigo y a pesar de que yo tendría muchos hijos más te apoyaré con lo del diú.

Vic: antes la casa me parecía enorme para mi sola, ahora me parece que se nos va a quedar chiquita con tanto niño.

H: no, lo que tenemos que ir búscando es una manera de contarle a María sobre tu nuevo e inesperado embarazo, la he visto con Estrella y parece muy contenta con su llegada.

Vic: Si, mi niña, es tan dulce a pesar de ser tan pequeña, Heriberto, no te olvides que María es una niña especial, ha tenido mucha falta de cariño y tenemos que pasar todo el tiempo que podamos con ella para que no se sienta celosa cuándo le digamos que tendrémos otros dos bebés.

H: si...¿que te parece si esta noche hacemos una fiesta en el jardín?, una fiesta para celebrar que hemos superado todas las barreras que la vida nos ha puesto, para celebrar que superaremos las que vengan en el futuro, para celebrar también la llegada de nuestra hija, el que estés embarazada otra vez, la llegada de María y como no, la recuperación de tu mamá.

Vic: me encanta la idea, una fiesta familiar.

H: exacto (le dió un besito).

Vic: bueno pués ve preparando todo para la noche, yo voy a salir para la comisaría, tengo que quitárle la denuncia a tu madre, no quiero seguir con esta guerra.

H: no, no vas a quitárle la denuncia...ella cometió un delito y tiene que pagar por ello, Victoria yo te agradezco quieras tener ese gesto con ella pero no quiero que lo hagas, mi madre no es una buena mujer, me lo ha demostrado con sus actos, no voy a dejarla de querer nunca por que fue la mujer que me dió la vida pero le hemos dado muchas oportunidades, si no las supo valorar es una cuestión suya.

Vic: ¿y que hay de Estrella?, tu mamá es su abuela, ¿no le vas a decir que ya su nieta nació?.

H: no creo que le importe, si no te respeta a ti como mi esposa, tampoco quiero que conozca a mi hija, al fin y al cabo Estrella proviene de ti t de mi, de nuestro amor, el mismo amor que ella quiere destruir, no, no merece conocerla.

Vic: está bien, como tu decidas, mi amor, solo recuerda que es tu madre, no la defiendo por que sabes que no me cae bien, siempre hemos tenido una rivalidad desde el princípio pero ella solo intenta protegerte de mi por que piensa que sigo siendo aquella mujer malvada capaz de todo por que se haga lo que quiero, cree que te manipulo, que eres mi juguete y que me río de ti, eso es lo que le impide ver que cambié, que esa mujer ya no existe, que te amo, que eres el amor de mi vida, quisiera tener la fórmula para desmostrárselo.