⓿❷❺

371 60 8
                                    


Nuevo día de ensayo.

Nuevos murmullos de bailarines cada que el japones se acercaba a Wooseok.

Ninguno de Pentagon parecía notar ello, solo el beta más alto lo hacía, como si cada palabra taladrara en sus oídos, cada vez sintiendo sus hombros más pesados, su respiración más lenta, sus dedos con un cosquilleo a causa de los nervios.

Sus movimientos empezaron a ser más descuidados, más irregulares y los tropiezos no se hicieron esperar; su frustración aumentando, haciendo señas a su líder de que estaba bien, que él podría seguir con la coreografía de lo nuevo que planeaban sacar. Quería dar lo mejor de si, Universe lo merecía, sus demás integrantes contaban con que todo fuera perfecto y él no iba a atrasarlos.


No se por qué esta con él.

¿Tal vez pena? Se que hay omegas que planean invitarlo a salir este viernes.

Lo mejor sería que acepte. Wooseok ni siquiera podría ayudarle con su celo.


Sin aliento.

Jung Wooseok se quedó sin aliento cuando ese murmullo llegó a su campo de audición. Esa ligera conversación tan casual que logró que su mente se desconectara por un segundo.

Yuto.

Alfa normal.

Omegas interesadas.

Celo.

¿Él...? Patético.

Decepción.

Inútil.

Omeg- ¡NO! ¡BETA, BETA, BETA!


— ¡Wooseok cuidado!


Caer.

Dolor.

Dolor.

Dolor.

Dolor.

Dolor.

Lagrimas.

Todo le fue en cámara lenta cuando su tobillo se dobló un poco y le hizo tropezar.

Pero el dolor no fue a su tobillo.

El dolor vino cuando su baja espalda golpeo contra borde de la mesa que yacía con las pertenencias del resto.

Su voz ni siquiera salió cuando sus labios se separaron, solo se escucho un quebradizo quejido acompañado de las lagrimas.
El dolor era palpitante, tan fuerte que no podía pensar, ni siquiera escucho el momento en que Hui gritó exigiendo la presencia del medico de la empresa, ni siquiera le dio importancia a que sus demás integrantes le había rodeado para ayudarle.
Sus llorosos ojos y cubiertos por su cabello rosado estaban fijos en el rostro lleno de preocupación de Adachi.

Él no debía estar con Yuto.

Yuto merecía estar con un omega.

Un omega bonito.

Un omega pequeño.

Un omega delicado.

Un omega con voz suave.

Yuto no merecía estar con un maldito mentiroso como él.

❀ ℰ𝓃𝒹𝓊𝓁𝓏𝒶 𝓂𝒾 𝓋𝒾𝒹𝒶 ❀ ▻ PENTAGONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora