⓿❹❽

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El lugar se sentía pesado, el calor que emanaban ambos cuerpos lograban que toda la habitación se viera envuelta en un ambiente sensual y excitante.

Las lenguas de ambos chicos se movían entre si, batallando por ganar el dominio que bien sabía ninguno tendría; sus manos metiéndose bajo sus ropajes para sentir sus pieles juntas, sus cuerpos ejerciendo la fricción necesaria para tener a ambos deseando más y más.

Shinwon fue quien dictamino el final del beso, todo para que sus labios se encargaran de dejar caminos de besos y mordiscos sobre el cuello del alfa bajo si, quien solo recibía ello con un gran gusto y aprovechaba para que sus manos acariciaran la espalda del idol.

Largos minutos bastaron para que ambos chicos quedaran solo en ropa interior, sus prendas tiradas a un lado en la cama sin serles molesto, sus caderas moviéndose de forma pausada para que la fricción entre ambos se sintiera aún mejor. 
Un ligero gruñido había abandonado los labios del alfa más alto, usando ambas manos para separar las piernas del más joven y así estar más cómodo, cosa que al mover su pelvis logró que su prominente erección chocara contra los glúteos impropios en simuladas embestidas.

Cuando Shinwon se acercó para volver a besar a su compañero, el ruido de su móvil se hizo presente, varias notificaciones cayendo una tras otra y haciendo que su rostro girara.


— Ignóralo, por favor, hyung~ —La voz suave del alfa de aroma a menta se elevó un poco, aprovechando que su mayor se había quedado quieto para deslizar su lengua por el cuello de este, inhalando el fuerte aroma a anís que tanto le gustaba y excitaba. 

— Puede ser algo importante de la empresa, Hyukmin. 


Aún recibiendo besos, lamidas y mordidas en su cuello, Shinwon estiro su mano, buscando alcanzar sus pantalones y así buscar en los bolsillos de este el aparato que había sonado momentos atrás. 
Al abrir los mensajes se quedó un momento quieto, leyendo y volviendo a leer todo ello. 

 

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Hyukmin, al estar cerca, también dio un vistazo a lo que estaba en la pantalla, soltando un bufido y dejándose caer por completo en la cama, sus ojos poniéndose en blanco en una mueca de disgusto.

— No puedo creer que justo ahora ese tipo quiera hablar contigo, que insistente es, joder.

— Hey, no te refieras así a él. —A pesar de no quererlo, Shinwon soltó un ligero gruñido al hablar, sus ojos brillando en una advertencia que logró sorprender al alfa menor. Cuando el idol se dio cuenta de ello también mostró sorpresa, él nunca había sido de gruñir o hacer uso de su estatus—. Lo siento, no quería gruñirte...

— Él te debe gustar muchísimo. —El de aroma a menta soltó una ligera risa al decir ello, poniendo sus brazos tras su cabeza para mirar con algo de diversión a quien tenía semidesnudo sobre si, como si fuera lo más normal del mundo—. ¿Me puedes decir por qué no están juntos? No lo entiendo.

— ¿De verdad? ¿Vamos a hablar de eso ahora...? ¿Teniéndote en ropa interior y con la polla que me explota?

— Bueno, entonces te la chupo y luego hablamos. 

— A veces te odio.


¿Momento de calentura? Totalmente apagado.

Pero al menos ambos alfas habían empezado a reírse mientras ''luchaban'' entre ellos, aunque la realidad era una guerra de cosquillas y almohadas que inicio el más joven, diciendo que quería saber toda la historia que el alfa más alto y ese rebelde omega tenían entre si.


HyungGu por su parte se mantuvo mirando su móvil fijamente, sus labios apretados entre si al ver como sus mensajes habían sido leídos pero no contestados.

Tal vez si debía dejar de molestar a su hyung.

❀ ℰ𝓃𝒹𝓊𝓁𝓏𝒶 𝓂𝒾 𝓋𝒾𝒹𝒶 ❀ ▻ PENTAGONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora