☁️La verdad tras el fuego☁️

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Habías pasado un par de cosas juntos, tras varias semanas de clases te diste cuenta de que Izuku podía ser más social de lo que aparentaba, había echo muchos amigos, pero sobre todo se juntaba más con Uraraka e Iida, parecía feliz y entusiasmado con ese curso. Pero entonces en una de las pruebas que puso vuestro profesor él acabo mal herido, consistía en dividiros en parejas y villanos y héroes, los segundos debían conseguir lo que custodiaban los primeros en un limite de tiempo, si no lo conseguían los villanos ganaban. Durante ese ejercicio no tuviste la suerte de que te tocara con Deku y aun así ese día descubriste algo que te aterrorizó.

Tras tu promesa de lealtad muchos de los sentimientos de Midoriya pasaban a ser tuyos para advertirte del peligro, si su corazón se aceleraba o su respiración se agitaba tu lo notarias en tus propias carnes sabiendo que no son tuyas esas emociones y correrías a su encuentro. Él había quedado atrapado en una lucha contra Katsuki y sin que tu mente pudiera reaccionar antes que tu cuerpo saltaste en su busca al edificio a pesar de las advertencias de tu profesor, pero cuando llegaste fue tarde Bakugou había lanzado una de sus explosiones que dio de lleno a Deku, lo encontraste justo cuando el tiempo acabo y la alarma sonó ruidosamente, amortiguando el sonido del golpe del cuerpo de tu protegido que dio contra el suelo.

Fue como si los cables de tu cabeza se cruzaran y enredaran bloqueando cualquier atisbo de sentido común. Avanzaste furiosa hacia el agresor de tu protegido y lo enganchaste del cuello con una fuerza inhumana, tu piel se agrieto con violencia haciéndote sangrar por cada abertura, tus ojos se iluminaron en un brillante verde llameante. Este no podía respirar y parecía como si sus fuerzas estuvieran siendo drenadas, todo a tu alrededor empezaba a ser consumido por las llamas que desprendía cada paso que dabas al andar, el fuego devoraba las paredes y el suelo con rapidez reduciéndolo todo a cenizas; nadie podía entrar y mucho menos salir, como si hubieras creado tu propia cárcel personal en la que tú solo tenias la lleve.

Todo parecía estar destinado a una gran tragedia, hasta que el pobre maltrecho cuerpo de Izuku se levantó y se arrastro hasta ti, sentiste sus débiles latidos a tu espalda, soltaste a tu presa y volviste tu cuerpo hacia él, tenia la cara llena de sangre, el traje roto y varios cardenales, y aun así te miraba con una sonrisa en el rostro.

Lo observas con cautela sin reconocerlo del todo, como un fantasma que cobra vida delante de ti

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Lo observas con cautela sin reconocerlo del todo, como un fantasma que cobra vida delante de ti.

- Estoy bien _______, puedes parar. - puede apenas pronunciar -

Tu nombre suena dulce y tranquilizador salido de su boca, te acercas y secas una lagrima que se desliza por sus mejillas llenas de pecas.

- Deku... - susurras -

Una parte de ti sabe quien es, que tu alma esta ligada a la suya y le debes lealtad infinita, acunada por la calidez de su sonrisa e impulsada por tu condición de ángel custodio unes tus labios con los suyos, el beso es delicado, con cariño, pero firme, transformando las llamas verdes en doradas y haciendo que las grietas de tu cuerpo supuren calidez. Te separas cuando sientes que todo esta bien y así es, las heridas de Izuku han sanado y Katsuki que ha sido alcanzado por el fuego dorado también esta curado.

Del cielo a la tierra (Deku x tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora