1 Matrimonio Forzado-Zaintsee (Zee Saint), Mii2(Jimmy Tommy) Omegaverse Terminad

Capítulo trece

Habían dado el descanso de las clases del lunes por la mañana y los tres amigos alfas se sentaron en su lugar de siempre.

Ninguno de los tres dijo una sola palabras durante un buen rato pues estaban ensimismados en sus propios pensamientos.

—Joder...mis padres regresan hoy y ya han dicho que la próxima semana se irán a Ibiza...mierda y yo me tendré que quedar aquí—se lamentó Pangpond.

Zee resopló con molestia.

—Asumelo de una jodida vez y alegrate de que esa minucia sea el mayor de tus problema.

Jimmy asintió conforme.

—Joder... yo si que tengo un problema grave, no sé como demonios convencer a Tommy de que estoy loco por él...le gusto pero se cree que sigo siendo un picaflor.

Zee volvió a soltar un sonoro bufido.

—Joder, sois patéticos.

Sus amigos lo miraron con desagrado.

—Oye ¿y a ti qué demonios te pasa hoy?—preguntó el más alto.

—Saint, eso me pasa.

—Joder, aún estás con eso... obligale y punto—habló Pangpond chasqueando la lengua con fastidio.

El alfa se levantó y empujó a su amigo.

—Joder, ¿crees qué no lo he hecho ya?...la voz es una jodida mierda, no sirve para nada con ese omega....la usé para que viniese a mi partido del sábado y me ignoró completamente.

—Oye yo no tengo la culpa de que ese tipo no te haga caso, quizás es culpa tuya...quizás no es tu destinado y estés equivocado.

Zee levantó su puño con intención de golpear a su amigo.

—Hey, hey tranquilo—Dijo el Jimmy separándolos—… oye relajate ¿Vale?, quizás Panpond no ha estado acertado con sus palabras pero puede que quizás nos hayamos equivocado y solo te interese a ti.

Zee negó frustrado

—No me he inventado nada...estoy seguro de que él es mi destinado, lo siento en mi interior....cada día que pasa es más fuerte.

—Puede que necesite más tiempo—habló nuevamente el más alto.

—Pero eso no explica porqué no se comporta como un omega normal...es muy extraño y el no tenerlo me está consumiendo lentamente.

En la tarde, luego de terminar las clases de ese día, el alfa decidió gastar su último cartucho con Saint, la súplica.

Este caminó apenado hasta la cafetería de l hermana de este y desde el ventanal lo vio atendiendo a unos clientes.

El omega se veía adorable con su uniforme, por lo que el corazón del alfa comenzó a latir con fuerza.

—No puedo estar equivocado...no puedo.

Tras suspirar profundamente, este guardó en su bolsillo las señas que llevaba apuntadas en un papel y acto seguido entró en el local.

Saint se quedó estático en cuanto lo vio entrar pero tras unos segundos, reaccionó y fue hasta la barra para preparar el pedido de la pareja que acababa de atender.

Luego de dejarlo en la mesa de estos, el omega caminó hasta la mesa en la cual se había sentado Zee.

—¿Qué demonios haces aquí?— le susurró entre dientes.

El alfa lo miró con pesar.

—Necesito decirte una cosa.

Saint resopló co molestia..

—En serio, déjalo ya, por favor...esto no es sano.

—Por favor, escucha lo que tengo que decirte.

El omega volvió a resoplar.

—Está bien, sígueme.

Ambos salieron al jardín trasero de la cafetería.

—Bien, suelta lo que tengas que decir y luego vete.

Zee asintió con pena.

—Esta vez he venido para pedirte perdón por todo que te he hecho, sé que fui muy impulsivo, lo siento.

—Está bien, te perdono pero...

El alfa levantó su mano para detenerle.

—Quiero decirte que lo que siento por ti es de verdad, Saint... te amo y quiero que seas mi omega, por favor no me rechaces más....te lo ruego, aceptame.

El omega soltó un profundo suspiro y a continuación negó con la cabeza.

—Lo siento Zee...no dudo de que tus sentimientos por mi sean reales, sino creo que no insistirías tanto pero yo no me siento así...realmente eres un alfa guapo y todo lo demás pero hasta ahí...sinceramente lo siento pero yo no te amo.

Al escuchar esto, el cabizbajo alfa asintió y roto de dolor salió de allí sin mirar atrás.

Luego de eso, el omega se sentó un momento y negó con pena.

—Lo siento mucho, Zee pero no es tu culpa, es que yo soy incapaz de amar a nadie.