Stéfano siente que no encaja en su familia, todo lo que ellos representan está muy alejado de ser su realidad.
Es un chico tímido y retraído, con excelentes ideas dentro de su cabeza que le cuesta demasiado poner en palabras.
Pero todo dará un gi...
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S T É F A N O
Existen momentos felices, y luego, un nivel por encima, está la sensación que estoy experimentando ahora.
Nunca pensé que sería posible, siendo sincero no confiaba mucho en mí, la veía tan perfecta, tan inalcanzable, de algún modo me sentía poca cosa.
Ya no me siento así, en poco tiempo muchas cosas cambiaron dentro de mí, esa seguridad que jamás había tenido se volvió esencial, todos los miedos de no ser suficiente desaparecieron para darle lugar a una versión de mí mismo que me agrada, que me hace sentir bien, y eso va mucho más allá de Luna.
Creo que de cierta forma Luna pudo verme porque yo mismo pude verme, porque me pude parar frente a la vida a decir "estoy aquí, y soy esto", y si fui capaz de todo eso, fue en gran parte gracias a Arianna.
Ella me vio cuando nadie más lo hacía, respetó mis tiempos lentos, me demostró que le gustaba simplemente por ser yo, y que no tenía que cambiar nada para estar a su lado. Ella me abrió la puerta a cosas que desconocía, me dio amigos, aventuras, risas, y experiencias que no voy a olvidar; pero no la amo, y no la voy a amar nunca.
El amor es así, te pasa o no te pasa, y por más que insistas, intentes una y otra vez, si no te acelera el corazón con solo una mirada, si no te pone nervioso con solo una sonrisa, por más que todo apunte a que es la mejor persona para ti no hay nada que puedas hacer.
Arianna me daba todo lo que cualquier persona podría necesitar para estar bien, y de todos modos no pude sacar a Luna de mi cabeza y mucho menos de mi corazón.
La amo, siempre la amé, incluso cuando no tenía idea de lo que era el amor. Hoy, que creo tener una idea un poco más clara de lo que significa, el amor que siento por ella está elevado a la máxima potencia.
Sin embargo, a pesar de que la felicidad me invade mientras veo a Luna sonreír recostada en mi pecho, hay algo que me pesa demasiado.
Estoy siendo una mierda con Arianna cuando no se lo merece ni un poquito. No solo le estoy mintiendo y estoy haciendo que Luna le mienta, sino que también la estoy rechazando en repetidas ocasiones porque no tengo el valor para decirle la verdad, porque sé que fallé desde el primer momento, que aunque me vanaglorio de haber sido sincero, sé que en realidad no lo fui del todo.
Yo no le dije que estaba enamorado de otra persona, le dije que aún no olvidaba a alguien de mi pasado, pero la realidad es que Luna jamás fue parte de mi pasado, siempre estuvo presente, de hecho nos besamos, peleamos, fuimos y vinimos; y eso no es exactamente ser "alguien del pasado".
Me dejé llevar por las hormonas, por el deseo y por las nuevas experiencias, y la dejé creer que tal vez en algún momento me iba a enamorar de ella, aún sabiendo que no sería así.
Y luego, sin siquiera tener una conversación con ella, mientras pensaba que aún estábamos juntos, le dije a Luna que la amo y me puse de novio con ella.