Capítulo 20

1.4K 224 100
                                    

L U N A

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

L U N A

No sé que le dijo Ciro al chico, bajó solo con Stéfano, lograron convencerlo aunque su actitud es bastante desconfiada y desagradable.

En cuanto llegamos a la casa el padre de Arianna ya no estaba. Matteo y Liam hablaron con él, y Frank habló con Arianna para explicarle por qué debían hacer la denuncia cuanto antes, ya que ambos aún tienen marcas en su cuerpo que son esenciales como pruebas.

Sé que las cosas se van a complicar, le dijeron que ella no estaba aquí, pero no tardará en descubrir que es mentira. La idea es que no pueda encontrarlos hasta que consigamos una restricción.

Por mi parte estoy evitando bastante a Arianna, todos están muy pendientes de ella, ha estado pasando mucho tiempo con Isa, y Ámbar también anda cerca siempre, a mí me cuesta mucho la mentira. Entiendo a Stéfano, pero al mismo tiempo creo que hay que decirle cuanto antes, ya aceptó la ayuda, ya está aquí, rodeada de gente y contenida por muchas personas que no somos nosotros.

Por eso la evito, porque me siento hipócrita siendo su amiga sin que ella sepa la verdad.

Han pasado unos días, con Stéfano casi no hemos tenido tiempo de estar solos, ella está en su casa y prefiero no ir, él viene en cuanto puede inventar una excusa y son esos pequeños momentos de amor los que sirven como combustible para resistir hasta el siguiente.

Hoy en particular, lo extraño. Acabo de regresar del trabajo, así que me decido por darme una ducha e ir a su casa, inventar alguna tontería y robármelo por unas horas.

Es tonto pensar en todo el tiempo que compartíamos antes, pasábamos horas juntos haciendo nada, y ahora que podríamos hacer muchas cosas tiene que ser complicado.

En cuanto llego a su casa me encuentro con Emma, que me dice que Stéfano está en la sala de abajo jugando videojuegos así que me dirijo allí esperando a que esté solo, pero no lo está, las voces de Arianna y él llegan al pasillo.

Sé que no está bien y de todas formas lo hago, me detengo a escuchar en la puerta que está entreabierta. No es porque no confíe, ni siquiera sé por qué en realidad, así me sale.

—Entiendo perfectamente que estés confundido, la quisiste mucho y yo no he hecho las cosas bien, pero puedo hacerlo mejor... —dice ella que está de espaldas a la puerta.

—Ya te he dicho que no se trata de que tú hayas hecho algo mal.

Stéfano no despega sus ojos del videojuego, al parecer es una conversación frecuente, aunque él no me ha mencionado nada sobre que ella insistiera, de hecho ha estado evitando bastante el tema porque sabe que está fallando.

—No te he dado la chance de conocerme realmente, seguí consejos tontos y te perdí, te quiero recuperar... sé que no está todo perdido, tú lo vales.

Me siento mal, por estar mintiendo, por estar escuchando una conversación que no me incumbe, y porque Stéfano no me ha mencionado nada de esto.

Él por fin deja el mando a un lado y pone sus ojos en ella, se ve bastante tranquilo, y su tono es frío, distante, como dijo ella.

Por una mirada [PR #1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora