The heart wants what it wants

Cap. 10 - Botellón

*Por la noche*
Narra Nina...

- Osea, que eso de que nos han invitado a un botellón va enserio.-digo insegura.

- Te caeran bien, creeme.-me asegura Jesús.

- Si tú lo dices... ¿Y qué me pongo?-me pregunto seria.

- No te agovies, ponte algo calentito.-me dice Bella.

- Bueno venga, voy a vestirme.-digo y subo a mi habitación.

Narra Jesús...

- Yo también que suelo tardar.-Bella desaparece del salón.

- Mujeres.-dice Dani y los dos soltamos una carcajada.

Cuando las chicas se vistieron, cojimos el ron y el vodka azul que habíamos comprado y salimos hacia allí.

Cuando llegamos allí estaban todos, Quique, Christian, Juan, Brian, Ismael, Judith y Raquel. Nos integramos deprisa. Y Nina y Bella también encajaron a la perfección. Al poco rato llegaron Adrián, Sonia y Marina. Se integraron y nos empezamos a conocer mejor. Íbamos caminando por las calles y dando tragos a la bebida, cada vez, todos estábamos más ebrios.

Narra Nina...

Todos me habían caído genial, y encima, nos habíamos hecho un grupo de Whatsap todos juntos. Empezé a notar mareos pero no le eché cuenta. Seguimos bebiendo, y yo llegué al punto de no saber nada de lo que hacia, absolutamente nada.

(...)

Narra Jesús...

Ya eran las 5 de la mañana, acabamos de llegar a casa y Dani y Nina suben juntos sin decir palabra a arriba. Al parecer soy el único que sabe lo que hace, los demás no pueden casi ni andar.

Me dirijo a la cocina y bebo un poco de agua, me giro aún dando sorbos y apoyándome en la encimera y quedo embobado ante lo que estoy viendo. Es Bella con solo bragas y sujetador. Dejo de dar sorbos.

- Jesús...-susurra acercándose a mí. Pero no logro articular palabra porque estoy un poco en shock. Empieza a besarme el cuello y a tocar mi abdomen sin disimulo alguno y dejo el vaso en la encimera.

- Bella estás ebria, no sabes lo que haces.-consigo decirle en un susurro.

- Me da igual, quiero hacerlo ahora contigo.-me dice decidida.

- ¿Eres virgen?-le pregunto.

- Sí.-me dice besando mi cuello.-¿Y tú?

- No...

- Pues enséñame.

- No te acordaras de nada.

- Me da igual.-dicho esto empieza a besarme salvajemente. Tanto, que la cojo de las nalgas del culo y la subo quedando cojida a mí como un koala.

La llevé hasta mi habitación y nos tiramos en la cama quedando yo encima. Entre besos conseguí quitarme las vans y los calcetines, para seguidamente quitarme la camiseta. Cuando me la quito de un ligero movimiento Bella se pone encima de mí. Mientras me besa el cuello y el torso aprovecho para desabrocharle el sujetador.

- Mnh.-gime ella pasando sus manos por mis bíceps. La vuelvo a poner debajo de mi chupo y manoseo sus pechos con mucha pasión.

- Mmm.-gime con deseo.

Me voy bajando los pantalones a medida que voy bajando por su abdomen hasta llegar al elastico de sus bragas.

- Aaah.-gime ella con desesperación.

Le quito las bragas y le abro las piernas.

- No te cortes, levanta la voz.-le digo sensualmente y ella sonríe.

Empiezo a chupar sus muslos, hasta llegar a las ingles.

- Aaah.-suspira Bella con un gemido.

Noto que se muere de deseo así que no la voy a hacer sufrir más. Empiezo a pasar mi lengua por su feminidad y empieza a gemir. Pasa una mano a mi cabeza y acaricia mi pelo con deseo. Meto mi lengua en su interior y la bombeo con ganas, ella llega hasta a gritar y llega a un miniorgasmo.

- ¿Estás lista?-logro preguntarle con la respiración acelerada.

- Vamos!-me anima con ansias.

Noto como mi gran erección palpita de la desesperación así que no dudo en colocar la punta de mi erección en la posición correcta y empiezo a penetrarla, una, dos, tres cuatro, cinco.... Y así hasta que perdimos la cuenta entre gemidos y besos. Llegamos 2 veces al climax. Terminamos y caímos rendidos bajo las sabanas.