Luna de Amor | Tanjiro Kamado

21

La pelea estaba llegando a su fin y el único herido en ese momento era Rengoku ya que tenía múltiples heridas y solo tenía un ojo, así que se le estaba complicando.

—Incluso si luchas con la intención de sacrificar tu cuerpo todo es inútil Kyojuro, los maravillosos cortes que me atacaron están sanando, ¿Y qué tal tú? Tu ojo izquierdo está roto, tus costillas están rotas y tus órganos están heridos, no puedes recuperarte de eso nunca más, si fueras un demonio te curarías en un abrir y cerrar de oj..

—¿Puedes parar? —se oyó el grito de la cazadora— ¡Deja de insistirle!

Se estaba estresando y su impotencia la obligó a intervenir de alguna forma, sintiendo su corazón dolido al ver al pilar en esas condiciones.

—¡¡Cumpliré mis deberes!! ¡¡No dejaré que nadie muera!! Respiración de enfoque completo: Aliento de llamas Esotérica Noveno estilo: ¡Purgatorio! —Akaza duró unos segundos en reaccionar, pero finalmente logró atacar.

—Matanza destructiva: Estilo de destrucción

—Aliento de sombra...

Luego de eso nuevamente una nube de polvo se hizo presente, y a la espera de que esta se dispersara pudieron ver una escena dónde solo se oyó a alguien nombrar:

—Rengoku-san

Akaza no podía sacarse de la cabeza a la cazadora gritando al borde de las lágrimas y la tierna voz de esta, pero aun así no debía distraerse y reaccionó ante la presencia de ella quien había puesto su mano en medio haciendo que el ataque fue a ella. Este la soltó de inmediato sin hacerle daño, confundiendo a todos los presentes. Rengoku con su cuerpo totalmente herido tomó al demonio de su brazo.

—No escaparas —este solo sujetó con aun más fuerza su espada y la clavó en el cuello del demonio dispuesto a cortarlo.

—¡¡_____!! ¡¡Debemos hacer algo!! —gritó el de ojos carmesí mirando a la joven.

La joven al escuchar eso solo asintió sin mirar a su compañero y clavó su espada en el cuello del demonio, a lo que esté trató de atacar de nuevo a Rengoku, siendo _______ quien trató de evitarlo pero, aún así logró clavar parte de su mano en el pilar.

Aunque, no era un órgano vital.

El demonio al notar como estaba por perder decidió arrancar su propia mano para poder irse.

—¡¡Deja de correr cobarde!!

—¿Pero que rayos dice ese mocoso? ¿Acaso no tiene cerebro? ¡No huyo de ustedes los cazadores, me quiero ocultar del condenado sol! además la pelea estaba por terminada, gracias a aquella cazadora...—tras lo pensamientos del demonio, Tanjiro se había logrado parar y apretó fuertemente su puño.

Empezando a gritar con todas sus fuerzas, soltó toda la rabia mientras que pequeñas lágrimas amenazaban con resbalar por sus mejillas, dejando de lado al pilar y su amiga quien trataban de recuperar el aliento ante todo lo sucedido.

Akaza volteó, siendo la última vez que haría esto. Los ojos de Tanjiro se fijaron en él con un gran odio.

—Ahora no sirve de nada gritar a todo pulmón

Ante la interrupción de Rengoku, Tanjiro reaccionó.

—La herida de mí estómago se está abriendo —agregó—. Jovencita, si muero, será mí derrota. Vengan, acerquense, tengamos nuestra última charla.

La cazadora tan solo lo miró y arrancó su propio uniforme para poder colocarlo en la herida del pilar mientras que él hablaba.

—No hable, por favor —pidió.