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| Estúpida |

No entendía que demonios sucedía con las personas que les gusta hablar de las demás sin siquiera saber absolutamente nada de ellas

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No entendía que demonios sucedía con las personas que les gusta hablar de las demás sin siquiera saber absolutamente nada de ellas. Apenas tenía una semana que había llegado a esa nueva Universidad, y para ser honesta, es una total mierda, en primera porque ya tenía el apodo de zorra, puta, cualquiera, y muchos más que en este momento no recuerdo bien. En segunda; porque no tenía amigos, bueno, sólo por Taehyung y Namjoon, los cuales son muy valiosos para mí. Traté de no darle mucha importancia a aquellos apodos, pero cuando los rumores empezaron tuve que sacar mi perra interior y decir que eso realmente no era cierto, aunque nunca me creyeron.

Suelto un suspiro y miró a el señor Lee, un señor de edad avanzada, el cual es nuestro chófer privado, ya que mamá tiene su empresa aquí en Corea y es una CEO muy importante y reconocida mundialmente, no falta los envidiosos que tratan de hacernos algo malo, por eso mismo, no puedo salir casi de casa y tampoco es como si quisiera, no puedo.

En fin, regresando al tema principal, hecho un vistazo a la ventana, estaba aburrida en el trascurso hacia la Universidad, todos los días era lo mismo, los mismos árboles, las mismas personas, las mismas rutas...en fin. Incluso me causaba gracia lo tan acertada que podía ser, porqué si miramos a la derecha, podemos ver a un señor canoso, con una espantosa pijama que lo único que me hace pensar, es que no tiene sentido de moda en absoluto; y en su mano, sostiene una correa, mientras regaña a su perro por no querer correr con él. Volteó hacia esa dirección y, ¡Bingo! Ahí está ese señor. Rió y entonces otra vez hago un presentimiento.

Una señora, más o menos de setenta años, gritando desde la vereda hacia su casa dónde está parado su esposo, con una manguera regando el césped, volteó hacia esa dirección y, ¡Bingo! Ahí está, ah, esa señora tan linda como siempre.

Y si dirijo mi mirada hacia el frente en 3, 2, 1...¡Yah! El semáforo cambia a rojo, deteniéndose antes del cruce.

-Señorita - levantó la mirada de mi regazo, dándole toda mi atención a Lee. -¿Tomó su medicina está mañana? - asiento, sin darle mucha atención ahora. Odio que me recuerden eso.

El semáforo regresa al color verde y el señor Lee, avanza de nuevo.

Mi mirada cayó en la ventana, la cual empezaba a tener gotas de agua, las cuales empezaban a ser más, hasta que una fuerte lluvia nos atrapó. Maldije a todos los cielos y al causante de la lluvia, abrí mi mochila, saqué mi paraguas fácil de transportar. Lo saqué y desabroché el seguro, estando lista para salir al llegar.

-Señorita, hoy vendré por usted, ya que su madre tiene una reunión importante y quiere que usted la acompañé - volvió a hablar el señor Lee.

»100 days ✔️ [ Yoonlice ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora