🌊21. ¿Hice algo mal?

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Narra Emily

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Narra Emily

Esas escenas me hicieron sentir enferma.

— ¿Nos vamos?— los ojos verdes de Carlo me analizan.

— Claro — ambos salimos del lugar, me lleva hasta su auto.

— ¿Qué opinas de ir a mi apartamento?— que más da si ya estuve ahí.

— Bien — me sonríe y enciende el motor.

Al entrar evito que el recepcionista me mire, debe de recordar cómo salí de aquí.

Bajamos del ascensor, toda la decoración sigue exactamente igual como la recordaba.

Me lleva hasta el salón, pone algo de música suave. Tomo asiento en uno de los sofás y este me sigue sentándose a mi lado.

— Gracias por esta noche — dice seductor.

— Gracias a ti — no puedo evitar sentirme intimidada.

— Ya te había dicho lo hermosa que eres — toma mi mano y la besa.

No se qué responder, mi cerebro va a colapsar en cualquier momento.

Al ver que no lo detengo los besos van subiendo a lo largo de mi brazo, me escruta esperando que lo detenga sin embargo no lo hago.

Llega hasta mi hombro y besa mi clavícula, siento mi piel encenderse, trago grueso, está de más decir que cualquier mujer caería a sus pies en un abrir y cerrar de ojos.

Sigue hasta mi cuello, inhala mi perfume, lentamente toma la tira de mi vestido y la baja por mis hombros.

Su mano acaricia mi rostro, sin pensarlo tengo sus labios sobre los míos, es un beso demandante y lleno de deseo, su lengua se abre paso impidiéndome razonar, mis manos van a su cuello y profundizo el beso, sube lentamente mi vestido acariciando mis muslos.

Un jadeo escapa de mis labios, me deshago de su camisa torpemente, dejando a la vista su cuerpo trabajado, sus manos van a la otra tira de mi vestido, sin dejar de repartir besos por mi cuello.

Mi cabeza parece encontrar la realidad.

¿Qué estoy haciendo...?

No soy de las que sacan un clavo con otro clavo.

— Carlo — mi voz sale temblorosa.

— Dime preciosa — desciende hasta mi escote y succiona mi piel sensible, trago grueso tratando de encontrar mi voz y raciocinio nuevamente.

Me pongo de pie dejándolo confundido.

— No puedo — frunce el ceño.

— ¿Hice algo mal?— niego y acomodo mi vestido.

— No, simplemente no puedo hacer esto — pasa una mano por su cabello alborotado.

— Pensé que lo estabas disfrutando — sus pupilas lucen dilatadas.

🌊Tú, Mi Verano🌊 Libro #2/2 de Sol de Verano TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora