Cap 3-Mi Nuevo Baby

8.5K 643 1K
                                    

Narra Vegetta

Después de despedirme, mientras miraba como ese taxi se llevaba a mi próximo Baby, decidí caminar asía mi auto, hoy no iba a hacer trabajo, o por lo menos no en mi oficina, iría directamente a mi casa a pensar como traemelo...

-buenos días Vegetta, como le ha ido? -preguntó mi mayordomo, y próximamente niñero de mi Baby

-hola Willy, bastante bien la verdad, es mucho más hermoso, y tierno de lo que esperaba -le decía mientras me sentaba en mi sofá, él de inmediato cogió una copa y sirvió un poco de vino en esta

-me alegra mucho, y cuando traerá al joven? -preguntó mientras me entregaba la copa

-no lo se, pero lo que si se, es que sera muy pronto...-dije con una sonrisa probando él vino...

-lo se señor, este vino lo trajo Luzu, me dijo que se lo sirviera, para que usted probara la calidad, antes de sacarlo al mercado -dijo cuando lo mire con confucion, yo solo asentí, y con una seña le di la orden de que se retirara...

La calidad del vino es mucho mejor, te aseguro que sera un éxito apenas lo saques al mercado, y dejame una caja de estos en la oficina, él pago te lo haré después.

Luzu
Vegettita!, me alegra que te haya gustado él nuevo vino, y las cajas ya están en tu oficina, mejor dime como te fue con él amigo de mi Baby, te lo quedarás?

Oh. Luzu, que ser más hermoso y tierno, obviamente me lo quedare, pero tengo que pensar en como traermelo...

Luzu
Suerte Vegettita, si nesecitas ayuda me avisas, me tengo que ir, ya sabes como es Auron de malhumorado, cuando no le doy mimos

Cuidate Luzu, y cualquier cosa yo te aviso

(Cuatro días después...)

Llevaba saliendo ya cuatro días con Rubius, y por cada día que pasaba sentía, que muy pronto seria mi Baby, justamente hoy estábamos en él parque, y ya nuestro nivel de confianza era alto, por lo tanto yo aprovechaba esa pequeña confianza...

-Rubius, quieres un helado? -le pregunte mientras señalaba al señor de los helados.

Como siempre se lo pensó, casi nunca me aceptaba que le comprara cosas, siempre me las rechazaba o me las devolvía, pero esta vez fue diferente, me dio una pequeña sonrisa mientras asentía.

-pero primero, dame un besito -dije mientras le mostraba mi mejilla, pude notar como su angelical e inocente carita, se ponía roja, lo cual hacia que explotara internamente de ternura...

Me pare de la banca con mi sonrisa triunfal, no fue un beso largo, pero beso, es beso, fui donde él heladero y pedí él helado, como aún no nos conocíamos bien, le compre un helado de chocolate, por que a todo él mundo le gusta él helado de chocolate.

-gracias...-le di él helado y él me sonrió, mostrándome esas perlas blancas.

Yo le devolví la sonrisa, y me quede viendo como comía su helado, disfrutando cada lamida que daba, limpiando el cono con su lengua, cuando se derretía, gozando cada pedazo de helado que comía, mientras que me miraba con esa sonrisa, que solo él sabia darme, y con esas simples acciones, lograba que mi cabeza creara imágenes obscenas...

Mire la hora en mi reloj, 7:00 p.m, observe al rededor del parque, y no vi ningún taxi, ni mucho menos a personas, no iba a dejar que Rubius se quedara por aquí esperando transporte, no me iba a arriesgar de que alguien le quitara la inocencia.

Te Enseñaré {Daddy Kink} RubegettaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora