Capítulo 26

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—Hola Adrian, ¿podemos hablar?

Melanie parecía nerviosa, sin embargo él no estaba mucho mejor.

Después de varios días sin poder conciliar el sueño debidamente, había tomado la decisión de dejar de pensar en esa llamada.

Podía comprender los motivos de Bobby Knight para llamarle y ponerle sobre aviso acerca de su relación con Dana.

No podía negar que no estaba sorprendido por el hecho de que ella hubiese sido sincera con el chico y le contase que entre ellos sucedía algo más que la relación de amistad que se suponía debían tener.

Lo que si le sorprendió y fue el motivo principal por el que el sueño le había evadido durante casi una semana, era que Dana le pidiese a Bobby y no a él que fuese con ella a Nueva Orleans.

—Por supuesto.

Secándose el sudor de su frente con la camiseta, le indicó a Melanie que se sentase a su lado sobre una bala de heno y le agradeció con una sonrisa la botella de limonada que le entregó.

El silencio les envolvió durante unos incómodos segundos antes de que Melanie finalmente reuniese el valor para pronunciar las palabras que había mantenido en su garganta durante demasiado tiempo.

—Sé perfectamente que no puedo hacer que tus sentimientos hacia mi cambien y llegues a verme como a algo más que una amiga, pero quiero que sepas que mis sentimientos son sinceros, Adrian. Nunca había sentido por nadie lo que tu me haces sentir y sé que si me dieras la oportunidad...

—Melanie...

Poniéndose en pie, detuvo las palabras de ella con un gesto de mano, antes de darle una respuesta.

Su relación con Dana no iba a ir a ningún sitio, y tal vez, Melanie podría hacerle olvidar con el tiempo, pero no era justo con ella. La apreciaba demasiado para jugar de ese modo con sus sentimientos. Merecía mucho más que solo una parte de si mismo. Merecía a alguien que la amase con la misma intensidad de la que ella era capaz. Y él no era esa persona.

Las palabras ni siquiera tuvieron que salir de sus labios. Con una triste sonrisa, ella se puso en pie, le besó en la mejilla y le susurró al oído que le deseaba suerte. Después de eso, se alejó.

Muchas veces deseó haber hecho las cosas de otro modo. Haberle dado una oportunidad, pero no podía. No mientras siguiese amando a Dana.


UN AÑO Y MEDIO MÁS TARDE

Desde primera fila, Adrian observó como su hermana daba el si quiero a su ahora marido.

A su lado, una Charlotte feliz aplaudía mientras sus padres se besaban.

Sonrió al recordar como su padre, casi había mantenido a Amelia lejos antes de entregarla a Nathaniel en el altar.

Vio como su hermano reaccionaba extrañado durante un momento de la ceremonia, y fijando la mirada hacia donde él lo hacía, vio a su abuela Alex hablar con alguien que no podía ver y supo sin duda, que el don de su abuela estaba activo aun.

Volviendo la mirada hacia Evan, se preguntó si él habría visto algo más.


—Ha sido una ceremonia preciosa, cariño. ¿Por qué no vas a hablar con tu hermana antes de que termine con toda la tarta?

Adrian rio ante las palabras de su madre y fue a sentarse con su hermana.

Esta apoyó la cabeza sobre su hombro y hablaron durante unos minutos hasta que al mirar hacia un lado, se tensó.

Había evitado mirarla o hablar con ella durante toda la ceremonia, pero no podía mantenerse alejado más tiempo. No cuando vio como Bobby y ella discutían y este se iba dejando a una Dana temblorosa y llorosa tras él.

—Joder.

Sin pensarlo dos veces, se puso en pie y caminó hacia ella.

Puedes tenerme (Serie Love 20)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora