EL OMEGA DE LAS MELODÍAS // ⚡YooภmᎥภ⚡

꧁ 𝟙𝟜

En colaboración con @Elladejung 💕

Tan elegante, una criminal que me destruye
No está bien, intento y sacudo mi cabeza

Oh, pero solo estoy siendo arrastrado más profundamente

El momento en que me enamoro de ti es el fin de mi inocencia

El síndrome llamado "tú"

Me atraes y me sacudes...

CRIMINAL- TAEMIN

Tal vez y solo tal vez, Min aún sentía miedo de sus propios sentimientos y lo rápido que estos habían crecido por aquel chico de tierna sonrisa y brillantes ojos almendrados, cada vez que lo veía se sentía completamente ahogado en sus pensamientos, con la saliva prácticamente seca y sin saber que decir, perdido en dichosos ojos con forma de media luna, ¿Y quién no con semejante obra de arte frente a sus ojos?

Habían transcurrido tan solo un par de días desde aquella vez en la casa del omega y aquellos días eran sin duda un total remolino de emociones para el azabache, por momentos se sentía dichoso y completo, ahora que finalmente aceptaba sus sentimientos por el pequeño pelirosa, pero después de esa alegría quedaba un pequeño sabor amargo, aún no había dejado el pasado atrás, sentía que algo lo ataba a ello pero no entendía el motivo.

—¿Estas bien, hyung? —susurró el pelirosa con sus ojos brillosos y sin quitar la vista del angustiado alfa—Si no te sientas bien, podemos dejarlo para después.

Hoy al fin, era el día de su ansiada cita con el menor y ya lo estaba arruinando nuevamente, ambos chicos se encontraban parados frente a la puerta de aquel lujoso restaurant y es que desde aquel día en el que Jimin se había lastimado y el alfa le había llevado a su casa, el azabache había decidido que era mejor dejarlo descansar y pasar para otro día su cita, al menos hasta que el omega se sintiera en mejores condiciones.

Sin embargo ahora que por fin había llegado el momento se encontraba como una estatua frente aquel glamoroso local, sin emitir sonido alguno y con la cabeza llena de acertijos sin resolver.

Antes de que su valor disminuyera y sus manos empezaran a sudar desesperadamente, el alfa tomo la mano del pequeño pelirosa y lo jaló hacia dentro del lugar con cuidado, las mejillas del menor se sonrojaron inmediatamente por el contacto y lo siguió con una pequeña sonrisa en su rostro hasta su mesa.

El azabache le extendió la silla y éste se sentó a gusto—Lo siento si parezco distraído, es que fue un día un poco pesado—expresó Yoongi para sentarse en su respectivo lugar y quedar frente al hermoso omega.

—Usted debe ser muy bueno en su trabajo—murmuró el menor intentando ocultar su sonrojo con la carta del menú que se encontraba sobre la mesa.