꧁ 𝟚𝟘

925 154 15
                                    

En colaboración con @ElladeJung ❤

Las manos de Jimin estaban algo inestables mientras preparaba la cena para la gran noche

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Las manos de Jimin estaban algo inestables mientras preparaba la cena para la gran noche. El omega podía sentir claramente como los nervios lo comían por dentro y por más de que faltaba casi dos horas para que Yoongi llegará, él quería que todo fuera perfecto, por ese motivo después de salir del hospital le pidió a Hoseok que le acompañara a algunos lugares para comprar todo lo que necesitaría.

Sin duda hoy sería un día muy significativo para ambos chicos.

Pero lamentablemente para el pelirosa no todo era perfecto porque mil preguntas arremolinaban en su cabeza justo en ese instante, ¿Qué pasaría si Yoongi no quería al bebé que crecía dentro de él? Aunque eso no significaba que Jimin renunciaría a su hijo por el amor de un alfa, pues si algo le había enseñado su madre era que los hijos estaban por encima de cualquier otra persona pero aun sabiendo ello era inevitable que el simple hecho de pensar que Yoongi no los querría hacía a su corazón doler.

Tan inmerso estaba en sus pensamientos el pequeño que no reaccionó el momento en que se cortó el dedo y dejó caer el cuchillo, silbando ligeramente por el ardor que empezaba a emanar. Maldita sea, chilló.

Con pesar se apoyó en la mesa y se obligó a tomar algunas respiraciones profundas para calmar el dolor que empezaba a empeorar, pero esto no lo ayudo a calmar el sentimiento de pánico que sentía. No pensaba que el solo hacerse la idea de que Yoongi no los quisiera, lo estaba deprimiendo desde ya, sabía que pensar en cosas negativas estando en su estado no era lo correcto pero sentía necesario estar preparado.

Removiendo su cabeza para sacar aquellos pensamientos que solo lo disgustaban, siguió en su labor de preparar la cena, había planeado cocinar una lasaña y ya que él no podía tomar vino, prepararía una limonada blue frozen, la que según Jungkook era la favorita del alfa, tenia todos los ingredientes listos, ahora solo tendría que concentrase en la preparación. Pero el destino no estaba de su lado porque justo en ese instante alguien toco el timbre.

¿Quién podría ser justo ahora? Obviamente Hoseok no era, ya que el omega le había contado de su cita con Jungkook, y pedía porque fuera cualquier otra persona menos Yoongi, pues los nervios justo ahora se habían acrecentado en su interior y con el corazón en la mano se dirigió a la puerta.

Cuando la abrió, lo primero que apareció fue el perfecto rostro de Yoongi, el corazón del omega comenzó a golpear tan fuerte que podía sentirlo en todo su cuerpo—¿Qué haces aquí, Yoonie? Se suponía que nos veríamos en dos horas.

—Lo siento—susurro arrepentido el alfa mientras su tono nervioso lo delataba—No podía aguantar, necesitaba verte.

Jimin trago grueso y asintió preocupado. Tenía la ligera sensación de que esto no le iba a gustar—¿Qué quieres decir? ¿Ocurrió algo?

Por un momento el alfa se arrepintió y considero lo que estaba pensando, sus labios fueron apretados en una fina línea antes de declarar lo ocurrido—Yo... en serio...

Pero aunque Yoongi continuara hablando, Park ni siquiera lo escuchó, pues una fuerte oleada de feromonas de un omega desconocido le llegaron de forma abrupta e interrumpieron en su concentración, un instinto que el pelirosa nunca en su vida había experimentado, nació desde lo más profundo de su ser y con fuerza, soltó un gruñido y su lobo erizo los pelos de su lomo, arañando desesperadamente sus entrañas y tratando a toda costa de emerger.

Aquel olor, el omega lo había sentido antes en la casa de Min, era muy tenue pero aun así demasiado desagradable para su lobo y aunque casi había desaparecido, seguía presente en el lugar y sin duda era el mismo que ahora estaba percibiendo.

Yoongi estaba impregnado de ese horrible olor y eso lo estaba molestando de sobremanera.

—Apestas—fue lo único que murmuró el pelirosa mientras se tapaba la nariz para evitar descontrolarse por aquel irritante olor.

—¿Qué?—la expresión de Yoongi era confusa y sin comprender lo que ocurría, al parecer aquel detalle se le había olvidado.

—Apestas a omega en celo, está impregnado en todo tu cuerpo—refunfuño el menor arrugando su nariz.

El alfa se percató de aquel detalle y sus nervios aumentaron al no encontrar las palabras correctas para explicar lo que había sucedido—No es...

—No escuchaste, apestas a omega en celo—repitió entre gritos Park, su lobo se estaba empezando a apoderar de él y ya no podría controlarlo.

—Jimin no es lo que crees...cariño puedo explicarlo...

—Es la mismo omega ¿no? Para el que compraste ese anillo que encontré en tu casa ¿No es así?—pero sin que Yoongi pudiera defenderse el chico prosiguió—No te preocupes, no necesito explicaciones, estoy acostumbrado a esto—pequeñas lagrimas empezaron a descender se los almendrados ojos del pequeño omega, estaba llorando de impotencia, de rabia y no lo iba a ocultar.

—Jimin no, cariño no llores—el alfa suplicó e intento acercarse pero el pelirosa se alejó abruptamente con el ceño notoriamente fruncido.

Aquella mirada mando una punzada de dolor al cuerpo de Yoongi, ¿Que estaba haciendo? ¿Por qué diablos lo estaba arruinado de nuevo?

—Pequeño yo te quiero a ti y no me importa nadie más que tú—el azabache empezaba a desesperarse al sentir como su lobo le rezondraba por sus accionar y notar como su amado se entristecía por su culpa.

—No te creo ...

La voz de Jimin empezaba a quebrarse y sin duda Min no permitiría que esto se quedará así, ahora entendía porque Suran había soltado tantas feromonas en forma abrupta y lo había besado sin su consentimiento, estaba intentando marcarlo.

Por la mente del alfa pasaron mil alternativas de que hacer pero cuando sus ojos se encontraron con los del menor simplemente se quedó perdido, no podía imaginar su vida sin aquel chico, había impactado de forma penetrante en su corazón y no se permitiría arruinarlo, no dejaría ir aquello que tanto amaba—Si supieras todo lo que provocas en mí nunca más volverías a repetir aquello. ¿Qué tengo que hacer para que entiendas que solo tú me importas?

Pero antes de que el omega pudiera intervenir, sus labios fueron atrapados por los el mayor, un beso diferente a cualquier otro, un beso que desprendía todo los sentimientos encontrados del momentos, que era duro y a la vez excitante.

El beso fue más que primitivo y devastador, fue salvaje y contundente, dónde el alfa reclamaba todo lo que sentía por el menor y aunque al principio este no lo haya correspondido, fue cuestión de segundos para que respondiera a su necesidad, chupando suavemente la lengua del azabache. Poco a poco empezó a relajarse, dejándose llevar por la atracción que sentía, esto iba más allá de su entendimiento, esto que tenían los dos era a lo que se le llamaba pareja destinada.

Se viene la segunda parte🤧👌❤

EL OMEGA DE LAS MELODÍAS // ⚡YooภmᎥภ⚡Where stories live. Discover now