Capítulo 41: Trabajo en equipo

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El recorrido era tranquilo. Luego de que salieran de la zona boscosa aledaña a Konoha, se encontraron en un amplio llano de corto pasto y árboles aislados, que se extendía hasta donde alcanzaba la vista, recorriendo todo ese lugar con una ligera carrera disfrutando del viento en camino a su tierra ancestral.

Mientras continuaban su ruta a través de la aparentemente interminable pradera, Naruto iba rememorando la breve presentación que había tenido con las dos hermanitas en ese escenario fabricado por su mami pelirroja…

El rubio se posó delante de Mito, a la derecha de Kushina, que la separaba de Fuusou. Los tres Genin Uzumaki se disponían a recibir las instrucciones de la matriarca Uzumaki, puesto que como los únicos supervivientes del clan, bajo la tutela de la afamada Kunoichi, era su deber convertirse eventualmente en las semillas de un nuevo resurgir Uzumaki y al estar tutelados por tamaña personalidad del clan, la mezcla de admiración y respeto los hizo cuadrarse perfectamente, salvo por la menor de las hermanas, que por instinto permanecía levemente encogida.

La legendaria Uzumaki se había despojado de su Kimono blanco y se había envestido con una armadura de color negro, como las que se utilizaban en la época de la era de los clanes.

- Muy bien, chicos…- La esposa del afamado Shodaime Hokage se mostró seria, con una rectitud imponente engrandecida por la armadura Ninja similar a la de su esposo -Como saben, éste viaje lo realizamos con el fin de ir a las ruinas de Uzushio y rescatar lo que se pueda de nuestro legado… Posiblemente las ruinas de nuestra cuna ancestral hayan sido sometidas al saqueo a lo largo de los años, pero como expertos en sellado, incluso en una situación extrema como la destrucción de Uzushio, los Uzumaki somos capaces de poder sellar ya sea pergaminos, libros, objetos…- La mujer suavizó su expresión -Pero bueno, como saben, es secreto de estado que yo me encuentro con vida, así que durante éste viaje, cuando nos encontremos en alguna aldea o poblado, tomaré la forma de una anciana, así que durante ese subterfugio, ustedes serán mis pequeños nietos… ¿Han comprendido?-

- ¡Sí!- Asintieron el rubio y la pelirroja de tono brillante, con firmeza

- S-Sí…- Murmuró timorata la menor de las hermanas

- En otro asunto…- La experta en Fuinjutsu suavizó su expresión -Como saben, tenemos otro deber para con el clan… Nos iremos en unos minutos, tengo que hacer un par de cosas, pero no tardaré, aprovechen para conocerse mejor…-

La pelirroja imponente posó su mano en el suelo, liberando una compleja fórmula de Fuinjutsu de perímetro circular, la cual se quedó grabada en el suelo. Entonces Mito se posó en ella y luego de verse rodeada de un resplandor carmesí, desapareció.

- Vaya…- Kushina se mostró sorprendida -¡Mito-sama es realmente asombrosa-ttebane!-

- S-Sí…- Fuusou sonrió tímidamente -La mejor prácticamente de Fuinjutsu del mundo…-

Naruto miraba analíticamente el contraste entre las dos hermanas: Kushina obviamente era la temeraria y entusiasta de la pareja, tal cual decía en el archivo que contenía la información cifrada en su ADN respecto a las dos hermanas, mientras que Fuusou claramente tenía una dependencia emocional hacia su hermana demasiado marcada.

- Bueno…- Naruto posó sus manos en su cintura, llamando la atención de las dos hermanas

- ¿Qué pasa?- Replicó la pelirroja mayor por minutos, mirando entre curiosa y graciosamente recelosa al rubio

Uzumaki's Strongest WeaponDonde viven las historias. Descúbrelo ahora