Among us [TERMINADA]

Capítulo 1

(Imagen: Pixabay)

(Nota de la autora: 

Esta historia es un fan fiction sin ánimo de lucro basado en el mundo del videojuego "Eldarya" de Beemoov. Todos los personajes, nombres, y/o referencias sobre el juego son copyright de Beemoov y sólo debe ser usado con fines no lucrativos. Yo sólo los he tomado prestados sin ánimo de lucro para escribir una historia con la que disfrutar.

Me he tomado muchas licencias con la historia por loque no encontraréis la misma línea de acontecimientos que en el juego originaly la situación de uno o varios personajes será distinta a la historia original. 

Este fanfic contiene: lenguaje adulto/soez, sexo, violencia y autolesión (creo que no se me olvida nada). A pesar de que algunas escenas sexuales puedan resultar algo rudas, el sexo es consentido entre todos los participantes.

Lo que quiero decir es, sé que este fanfic está enfocado a adult@s, pero, aun así, me gustaría transmitiros que el sexo se debe realizar con protección siempre para evitar embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual. Además, debe ser explícitamente consentido entre las partes que participan, sin suposiciones o valoraciones subjetivas. 

Gracias y espero que disfrutéis la historia.)

Ezarel

Se les había colado otra humana por el mismo portal por el que había llegado Gardienne hacía casi un año... Increíble. El portal parecía cerrado, pero, obviamente, respondía a ciertas condiciones caprichosas para abrirse y absorber ciertos... humanos. Caprichos que escapaban más allá de la comprensión y los conocimientos de la Guardia de Eel.

Dejó escapar un bufido, contrariado. Había un patrón fijo: humanos con cierto resto de sangre fae. Hasta ahí, bien. Pero... Había analizado las condiciones de llegada de ambas humanas y no coincidían en nada más: una llegó en verano, la otra lo había hecho en pleno invierno (de hecho, casi se les muere de hipotermia); las fases lunares eran completamente distintas; y sobre la apariencia física... estaba al 99% seguro de que no tenía nada que ver.

Echó la última disolución necesaria en la probeta y se apartó mientras el contenido se iluminaba un instante con una luz fluorescente. Ya estaba terminada la poción de "preparación de recepción de conocimiento". Era uno de sus logros más destacados como alquimista: preparaba a los sujetos para recibir y asimilar una gran cantidad de información de golpe. La información se "aportaba" a través de un hechizo llamado "transferencia" y se podía extraer dicha información de otro ente fae.

La utilidad era indiscutible.

Se levantó de su mesa de trabajo y fue hacia la enfermería donde la humana seguía "retenida"... literalmente. Después de que un centinela la encontrara tiritando de frío y medio inconsciente avanzando hacia la puerta principal del C.G., la llevaron a la enfermería. No permitió que Eweleïn la tocara entre palabras y gritos de furia en un idioma desconocido para los fae. Había golpeado a Valkyon en la cara cuando esté intentó retenerla en la camilla y le soltó alguna que otra patada mientras trataba de atarla. Aun así, Valkyon lo consiguió. Otra cosa no, pero su amigo tenía fuerza para regalar. Finalmente, a alguien se le había ocurrido la acertada idea de llamar a Gardienne para ver si ella hablaba el mismo idioma. Y... efectivamente. La posición geográfica del portal no cambiaba en el mundo humano. Ambas provenían de la misma zona: un sitio llamado Francia.

Abrió la puerta de la enfermería y vio a la nueva humana, ya liberada de las correas de la camilla, tapada hasta la barbilla con mantas. Estaba hablando con Gardienne, aparentemente tranquila dentro de lo estrafalario de la situación. Al verle, se incorporó con rapidez y se le pusieron los ojos como platos mientras iban de su pelo a sus orejas con insistencia.

- Ya tengo esto preparado. – Señaló, acercándose e ignorando la reacción de la chica. – Bien, ¿quién se ofrece para tener una jaqueca después de hacer de emisor? –

Miró a los presentes con una sonrisa inocente. Gardienne empezó a decir algo, pero Valkyon se adelantó.

- Yo mismo. –

El Guardián Obsidiana tenía el semblante serio (su cara normal), pero lucía una rojez que ya se tornaba púrpura en un lado de la mandíbula.

- ¿No te duele lo suficiente la cabeza después del golpe que te ha dado la humana? – Rió sarcásticamente señalando a la camilla con la cabeza.

La respuesta fue un encogimiento de hombros seguido de una explicación:

- Ewelëin no puede quedar fuera de servicio por una tontería así. Gardienne tiene tareas que hacer contigo preparando pociones térmicas para el invierno y con Karuto para renovar el menú de la cantina. Nevra está de misión y yo estoy todavía curándome el dislocamiento del hombro que me hice en el entrenamiento del otro día. –

Asintió a la vez que proponía:

- Podemos decírselo a algún recluta de las guardias. –

- Sí, pero yo estoy aquí y después te exigiré una poción para la jaqueca y... no me lo puedes negar. Al pobre recluta serías capaz de dejarlo sufriendo. –

- Así se endurecen ante el dolor. – Refunfuñó. – Está bien, no puedo discutir tus razonamientos. Parece que, después de todo, la cabeza no la llevas de adorno. -

Valkyon se rió con sarcasmo y Eweleïn y Gardienne rieron también la broma.

- Sabes que no lo dice en serio. – Le dijo Gardienne a Valkyon.

- Al contrario, yo solo digo la verdad. – Dijo, interpretando una postura majestuosa.

Seguidamente, fue a la camilla y, cuando iba a alargar la mano con el otro frasco idéntico hacia la humana, se detuvo y miró a Gardienne.

- No me morderá, ¿no? –

- En realidad, sí que muerde. -Valkyon mostró un mordisco sangrante en la mano.

- Joder. – Se le escapó a Gardienne. Y seguidamente, con voz condescendiente. - Ezarel, no es un perro. –

- Pero es tan inconsciente y agresiva como uno. ¿Quién se mete con más de cien kilos de músculos sin pensar en las consecuencias? – Dijo, señalando por encima del hombro a Valkyon. – Está bien, pero si me pega alguna enfermedad serás tú la responsable. –

- Me hago cargo. – Dijo Gardienne. – Déjame que le explique para qué es la poción. -

Esperó pacientemente, observando cómo la chica morena de la camilla se sentaba en el borde como un resorte al escuchar las palabras de Gardienne y asentía sin titubeos hacia su dirección.

- Se está tomando con mucha tranquilidad todo esto... Bueno, aquí tienes, humana. De un trago, ¿eh? –

Gardienne tradujo las palabras. Todos observaron cómo la chica destapaba el frasco que no medía más que su dedo más largo y lo vaciaba.

- Bien, ahora iré a avisar a Faliel para que realice el hechizo. Os veo luego. –

Se despidió sin entretenerse más ya que debía volver al laboratorio lo antes posible a seguir con las pociones térmicas y las curas para los resfriados de la época. Estaba de trabajo hasta más allá de sus orejas. Pero saldría de ésta victorioso. "Menos mal que mi Guardia cuenta con los mejores en sus filas... ", pensó con suficiencia, por lo que no pudo evitar que se le escapara una risa arrogante mientras recorría los pasillos hacia el laboratorio de alquimia.